“Al igual que tú, y ante los señalamientos de compañeros de partido, tengo una responsabilidad ética, política y jurídica, que es la de siempre respetar presunción de inocencia, evitando descalificar si no hay una resolución judicial de por medio, pero a la vez, con la misma convicción, alentando a que se deslinden responsabilidades y se haga justica cuando se tienen pruebas suficientes de ilegalidad”.
Ese es un fragmento de la respuesta del presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Marko Cortés, a la carta que le envió el gobernador Javier Corral el pasado 18 de noviembre, en la que el mandatario estatal le informó que la alcaldesa Maru Campos y algunos militantes panistas, tenían vínculos con el exgobernador César Duarte.
La respuesta del líder nacional del PAN al gobernador llegó el pasado lunes 23 de noviembre, en donde le pidió respetar la presunción de inocencia sin descalificar y actuar si existen pruebas suficientes.
Esto en referencia a que la alcaldesa Maru Campos ha señalado que no existen pruebas en su contra y por eso la Fiscalía General del Estado no ha podido actuar en su contra, por lo que ha insistido en que se trata de una persecución política de Javier Corral para imponer al senador Gustavo Madero como el candidato del PAN a la gubernatura.
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