Moscú. El Kremlin espera que Estados Unidos no utilice la operación militar Southern Spear (Lanza del Sur) contra el narcotráfico, que anunció el jueves anterior, como pretexto para “desestabilizar la situación en torno a Venezuela y la región del Caribe”, señaló este viernes su vocero, Dimitri Peskov.
El secretario de prensa de la presidencia rusa lamentó que “el derecho internacional se encuentra en un estado lamentable en muchos lugares”, en alusión a las amenazas estadunidenses contra Venezuela y Colombia.
La portavoz de la Cancillería, Maria Zajarova, también se refirió al tema: “Rusia comparte la preocupación expresada por los gobiernos de nuestros amigos Venezuela y Colombia”.
Insistió en que el combate al tráfico ilegal de estupefacientes “no debe usarse como medio de presión contra Estados soberanos”. Y reiteró: “Nos pronunciamos categóricamente en contra del uso de la fuerza o de amenazas de injerencia foránea en sus asuntos internos mediante toda suerte de pretextos, incluida la lucha contra el narcotráfico”.
Zajarova agregó que “partimos de que para detener el tráfico de drogas, también en Estados Unidos, antes que nada hay que consolidar los esfuerzos tanto regionales como internacionales”. La solución efectiva de los problemas, según ella, “puede lograrse sólo con acciones globales y con mecanismos internacionales legales”.
Pero, en opinión de la diplomática, “esto no es factible sin poner fin a las presiones que ejerce el Pentágono y que rebasan en mucho los parámetros de los objetivos que proclama el gobierno estadunidense, incrementando sus amenazas contra la estabilidad regional y la soberanía de la República Bolivariana de Venezuela”.
La funcionaria del ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia expresó la esperanza de que la comunidad mundial sepa condenar esta política (de Estados Unidos) “para prevenir escenarios catastróficos, que no sólo pondrían en riesgo la paz y la estabilidad en la región, sino también tendrían un impacto negativo en el sistema internacional de control legal de los estupefacientes”.
Source: Mundo



