Tras una intensa gira de trabajo por Ciudad Juárez y Chihuahua, el gobernador del Estado, César Duarte Jáquez y el director general de INFONAVIT, Alejandro Murat Hinojosa, encabezaron una firma de convenio de los dictámenes de adhesión de los municipios de Chihuahua y Juárez al nuevo régimen del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores.
A manera de reseña, el alcalde Javier Garfio Pacheco, comentó que hace 10 años Chihuahua fue noticia nacional por ofrecer viviendas económicas, cosa que fue muy bien vista en aquel tiempo, más actualmente no es la mejor opción, pues esto ha traído problemas incluso sociales, como el sonado caso de Laderas de San Guillermo, donde en una casa abandonada 5 adolescentes asesinaron a Christopher, un pequeño de 6 años.
Luego, el presidente municipal de Ciudad Juárez, Enrique Serrano Escobar, comentó que se siente orgulloso de haber trabajado todo el día con Duarte y Murat, primero en la frontera y posteriormente en la capital del Estado, pues han planteado soluciones de fondo a la problemática de viviendas abandonadas en el Estado.
“Antes teníamos un INFONAVIT cerrado, con quien era muy difícil dialogar, hoy en día encontramos un INFONAVIT sensible, dispuesto a escuchar los diversos sectores de la sociedad, adecuando las políticas publicas a cada municipio, lo que se convierte en soluciones inmediatas reales y concretas a la problemática que se ha planteado”, dijo Serrano Escobar.
Además, se signó un acuerdo entre el INFONAVIT y el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), José Miguel Salcido Romero, esto con la finalidad de resolver conflictos mediante la mediación, herramienta ampliamente promovida por el Poder Judicial del Estado.
Salcido Romero dijo que Murat es un amigo de Chihuahua, pues hoy por primera vez en la historia del Instituto, un director del INFONAVIT salió a las calles, específicamente a las de Ciudad Juárez, esto para recorrer y conocer la problemática de la vivienda popular de primera mano.
“El Poder Judicial entra cuando el trabajador no puede pagar el crédito y está a punto de perder la vivienda, lo cual es terrible para la familia que ahí radica, por lo que se sugiere un ejercicio de conciliación y mediación para que ambas partes lleguen a un acuerdo y la deuda no se convierta en algo incobrable para el INFONAVIT y el trabajador pueda conservar su casa”, comentó.