Los problemas que se tienen en la procuración de justicia hacia los indígenas se basan principalmente en la falta de modifcaciones al sistema en cuanto a la perspectiva intercultural, misma que deviene una serie de violaciones a los derechos humanos y acrecenta el rezago de herramientas para la defensa legal.
Diversas asociaciones en pro de los derechos de los indígenas han indicado que la presencia de un traductor en los juicios no es suficiente para desahogar el proceso, debido a que la falta de cercanía con la cultura de los pueblos merma el procedimiento legal, juzgándolos por delitos que en las comunidades no son considerados graves.
Jorge Carrera, delegado de Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), manifestó que para que este problema sea resuelto es necesario buscar puntos de encuentro en el acompañamiento de los juicios, aclarando que es necesario que el sistema judicial comprenda la cultura y no qe el indígenas comprenda los términos del juicio.
Miguel Ángel García González, titular de la Coordinadora de la Tarahumara, indicó que actualmente se encuentran trabajando en esta adecuación del sistema judicial, señalando que se está viendo la factibilidad de que no se engruesen las cárceles por delitos menores y que sean los mismos integrantes de las comunidades quien juzguen.
Aclaró que en la próxima semana estarán firmando un convenio con el Tribunal Superior de Estado para sensibilizar al personal de este poder en cuanto a los juicios que deben aplicarse, por lo que se tendrán conferencias de especialistas en el tema y de jueces dedicados al proceso de miembros de una etnia.
“En lugar de que los juzguen los chabochis, como ellos nos llaman, que no tienen conocimiento de su cultura, que sean juzgados por su comunidad, que ellos pongan las sanciones, en lugar de estar engrosando las cárceles”, detalló el funcionario estatal.