El Gabinete del presidente Donald Trump ha profundizado en las últimas semanas la demonización de los migrantes, a los que acusa de traer consigo al país vacas infectadas, lo que supuestamente ha generado la subida de los precios de la carne, en una narrativa falsa para ocultar sus desaciertos económicos, advierten expertos a EFE.
El secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, ha sido el último en cargar contra los indocumentados, tras afirmar -en una entrevista con FOX– que el aumento del precio de la carne de res en EE.UU. se debe a que los migrantes introducen ganado enfermo a través de la frontera.
“Debido a la migración masiva, una enfermedad que habíamos erradicado en Norteamérica se ha extendido desde Sudamérica, ya que estos migrantes trajeron consigo parte de su ganado”, dijo el secretario tras ser preguntado por informes que indican que el precio de la carne de res podría alcanzar los diez dólares por libra el próximo año.
Bessent trató de justificar sus palabras al argumentar que EE.UU. ha tenido que cerrar la frontera a la carne de res mexicana debido a los contagios del gusano barrenador.
Las redes sociales se han llenado de memes que ilustran a indocumentados tratando de pasar reses sobre el muro fronterizo, en referencia a las palabras de Bessent.
Estas afirmaciones también le dieron material al caricaturista mexicoestadounidense Lalo Alcaraz para compartir una mordaz crítica a Trump y su actual gabinete.
“Tengo que decirle a Bessent que las vacas son más fáciles de transportar hacía EE.UU. porque caben perfectamente dentro de una tortilla, con una salsa y cebollita”, dijo a EFE el artista, que plasmó su descontento en un dibujo.
Una narrativa “peligrosa”
Para Ricardo Valencia, profesor de la Universidad Estatal de California Fullerton, el mensaje de Bessent continúa de “manera peligrosa” la narrativa antimigrante alentada por Trump.
“Es una ficción muy bien elaborada que perpetúa la demonización de inmigrantes que le ha funcionado muy bien al republicano cuando quiere desviar la atención de los votantes”, dice a EFE el catedrático.
Valencia cree que el exabrupto del secretario del Tesoro busca justificar el alto costo de vida que ha desatado el descontento entre los votantes.
El más reciente sondeo de Ipsos y Reuters le dan la razón al profesor, pues solo el 26 por ciento de los encuestados entre el 14 al 17 de noviembre cree que Trump está manejando adecuadamente el costo de vida.
Culpables por la falta de casas
Bessent no ha sido el único en achacar a los indocumentados los problemas económicos del país, la semana pasada el vicepresidente de EE.UU., J.D. Vance, dijo -en otra entrevista con FOX– que el aumento de la migración indocumentada ha disparado los precios de las casas.
“Muchos jóvenes dicen que la vivienda es demasiado cara. ¿Por qué? Porque hemos inundado el país con treinta millones de migrantes ilegales”, declaró el vicepresidente en la conversación, en la que elevó sin pruebas el número de inmigrantes sin estatus que vive en EE.UU.
Vance aseguró que los indocumentados estaban “ocupando casas que por derecho deberían pertenecer a los ciudadanos estadounidenses” en un momento en que el país “no está construyendo suficientes viviendas nuevas”.
“Está tratando de repetir la narrativa de la ultraderecha en Canadá e Inglaterra, donde el Estado tiene un mayor control de las viviendas de interés social que se ofrecen al mercado, algo que en EE.UU. no sucede”, valora el profesor Valencia.
Por su parte, Miguel Tinker Salas, profesor retirado del Pomona College, advierte que las deportaciones masivas de las que se vanaglorió Vance y que ayudarían en el combate de la escasez de vivienda tendrían el efecto contrario, debido a la falta de mano de obra en la construcción.
“El objetivo (de esta narrativa) es reunificar a la base que está fracturada por el alto costo de la vida y escándalos como los de Jeffrey Epstein”, agrega el catedrático Tinker Salas.
Tanto para Alcaraz como para Valencia es necesario que la comunidad migrante denuncie y desmienta esta clase de narrativa.
“Aunque se crea que es tiempo perdido, no podemos quedarnos callados. Es nuestro deber contestar y dejar ver que las dos acusaciones son falsas, y que ambos (Bessent y Vance) desconocen la inmigración”, sentenció el profesor Valencia.
Con información de EFE
Source: Mundo



