Las policías de Colombia y México con la ayuda de una perra entrenada en la detección de narcóticos, confiscaron más de dos toneladas de cocaína en cargamentos que se suponían de tinta negra para impresoras enviados por traficantes sudamericanos al cártel de Sinaloa, dijeron el lunes las autoridades.
La Jornada citó a la agencia Reuters y detalló que el decomiso de la droga es la más reciente señal de nexos entre grupos de narcotraficantes de Colombia y de México.
Inicialmente, en el aeropuerto de Bogotá, la Policía de Colombia confiscó más de una tonelada de cocaína después de que la perra la detectó en un contenedor que supuestamente transportaba tinta negra en polvo para impresoras con destino a Sinaloa.
Tras el decomiso, las autoridades colombianas comprobaron que horas antes había salido de la misma terminal un cargamento similar por lo que avisaron a la policía mexicana que ubicó otra tonelada de cocaína en un avión en el aeropuerto de Ciudad de México. En ninguna de las dos operaciones hubo capturas.
Colombia sigue siendo uno de los principales productores mundiales de cocaína, con unas 442 toneladas anuales, pese a los esfuerzos del Gobierno para combatir ese delito en el que también está involucrada la guerrilla izquierdista.
En lo que va del año la Policía de Colombia ha confiscado 115 toneladas de cocaína.