Los habitantes de la localidad de El Castaño, en el municipio de Macuspana, Tabasco, amanecieron en los techos y con el agua a una altura de entre uno y tres metros debido al desborde de los ríos Puxcatán y Tulijá, una tragedia que, aseguran, no había pasado en al menos 50 años.
Los vecinos dicen que hay muertos, y señalan que ahora necesitan con urgencia alimento y agua potable.
“Hay mucha gente que está muerta, ahogada. Yo lo vi”, relató Ángel Antonio, un lanchero de El Castaño que ayudaba a los vecinos a salir de sus viviendas. Las autoridades no se han pronunciado sobre víctimas mortales en esta localidad.
“Es una situación que nunca había pasado en Macuspana”, dijo César Guadalupe Carrillo Sanchez, y agregó que la comunidad tiene dos días totalmente inundada.
“Mis vecinos y yo estamos sacando todo, pero con mucho esfuerzo. Sacamos ropa y víveres, lo que podemos”, relató don César, quien aseguró que la única manera de moverse por el pueblo era con cayucos o con lancha, “porque vía terrestre no se puede entrar”.
“Esto nunca había pasado, yo tengo 47 años de vida, 40 años viviendo aquí, y esto nunca había pasado”, insistió el hombre parado en una calle, con el agua arriba de la cintura.
Los vecinos pidieron ser evacuados, además de que temen a los lagartos y las culebras que están en el agua y por todo el pueblo. Señalaron que no han recibido ayuda del gobierno.
Mientras tanto, la única manera que tiene la gente para salir de sus casas es nadando, porque los lancheros no se dan abasto para ayudar a todos.
En algunas zonas de la localidad el agua tapó por completo las viviendas de un piso, los pocos afortunados con casas de dos niveles se resguardaron en la planta alta. Se pudo observar a un hombre bucear para poder entrar a su vivienda.
Source: Mexico