Un retroceso en el rendimiento de los atletas mexicanos ha derivado en diversas críticas a funcionarios públicos. Entre ellos Alfredo Castillo Cervantes, el actual director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), quien ocupó puestos gracias al Presidente Enrique Peña Nieto, desde que era Gobernador, pese a la falta de resultados en sus cargos.
“Yo creo que uno de los grandes errores de Peña Nieto, es no acertar en el nombramiento de los funcionarios para diversos cargos. Lo han llevado a que tenga una valoración sumamente baja en la percepción general de la sociedad mexicana. Uno de esos casos evidentemente es Alfredo Castillo”, consideró Eduardo Huchim May, analista político.
Peña Nieto se haya con unos niveles de impopularidad sin precedente, según diversas encuestas. Esta semana el Grupo Reforma, apuntó que el 74 por ciento de los mexicanos desaprobó la manera en que realiza su trabajo.
Y ahora, Castillo ha vuelto ha dejar en entredicho su designación al frente de la Conade debido a la deficiente participación de México en las olimpiadas de Río de Janeiro. En la que el titular de la Conade desde el 16 de abril del 2015, Castillo llevó a una acompañante a las olimpiadas, que ha sido exhibida por distintas fotos en redes sociales.
A la pareja del funcionario se le vio usando un uniforme de la delegación mexicana. Un tema que generó indignación entre los competidores participantes por la manera en que se gestionan los recursos públicos. México ha conseguido una medalla de bronce, conseguida por el pugilista Misael Rodríguez, mientras que en las pasadas competencias olímpicas el país se llevó siete.
Aunque Castillo quiso justificar que su acompañante acudió por motivos laborales. Los atletas criticaron sus actos. “Fácilmente hubiera estado un preparador o un fisioterapeuta que realmente necesitaba esa acreditación”, dijo la arquera mexicana Aída Román, medallistas en Londres 2012.
El problema de los uniformes en las competiciones deportivas no es nuevo. Competidores de natación y arco han participado en competencias internacionales sin la indumentaria que los identifique como mexicanos.
En el caso de los primeros, fue la solicitud de la Federación Mexicana de Natación (FMN) de ser sede del mundial Jalisco 2017, y su posterior cambio de opinión la que conllevaron un castigo por parte de la Federación Internacional de esta disciplina (FINA, por sus siglas en francés) hacia México, hasta que pague una multa de 5 millones de dólares. Un litigio en el que la Conade apoya a la FMN y que aún está por resolverse.
De esta cuenta el funcionario intentó justificar que la falta de buenas calificaciones para las clavadistas Paola y Ale se deben al litigio internacional con la FINA.
“Si consiguen a un grupo de expertos en clavados, que analicen uno por uno, los mexicanos y los otros y que te den la valoración, te vas a dar cuenta de que ha habido una postura bastante inflexible sobre el tema de los mexicanos y que tiene que ver con algo extradeportivo”, dijo en el programa “Atando Cabos” de Radio Fórmula.
En cuanto a los uniformes del equipo de tiro con arco, el funcionario advirtió que no era cuestión de su competencia sino de la Federación, añadió que tomaría cartas en el asunto para que no volviese a ocurrir. Pero volvió a pasar y no intercedió de nuevo.
En las competencias de Rio de Janeiro el pesista mexicano Bredni Roque, salió a competir con un uniforme prestado lleno de parches. “Nunca me imaginé que mis primeros Juegos Olímpicos serían de esa manera, me quitaron la oportunidad de portar los colores de la bandera de México”, dijo en un pronunciamiento en el que culpo a la Federación Mexicana de Levantamiento de Pesas por proporcionarle un uniforme que no era a su medida.
“Hay que decir también que en este aspecto de fracaso deportivo de México, que no sólo es responsabilidad de Alfredo Castillo sino que hay gente que está en las distintas corporaciones que deberían ser llamados a cuentas, por el Congreso o la sociedad civil. Los deportistas se han venido quejando de falta de apoyos, recursos, en fin”, dijo Huchim.