El grupo de 31 empleados del penal federal Altiplano de Almoloya de Juárez que están presentados ante la SEIDO acusaron, a través de su abogado, que permanecenincomunicados en las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR).
Entre el grupo se encuentran hombres y mujeres, incluso un matrimonio integrado por la empleada administrativa, Magaly Belem Barrera Maya, y su esposo, el custodio Edmundo Tamayo Díaz.
El abogado Juan Sánchez Jiménez explicó que ella es abogada y sólo cumplía con funciones administrativas en elCentro Federal de Readaptación Social Altiplano, mientras que Tamayo Díaz cubría labores diversas de vigilancia.
Este turno estaba preparado para dejar sus actividades a las 8:00 horas del domingo, luego de cubrir el turno de 24 horas de labores por 48 de descanso.
Sánchez Jiménez explicó que los trabajadores deben de mantener una conducta intachable y no generar problemas.
Familiares de los presentados acusaron que durante el domingo, el personal de vigilancia de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) les impidió el paso para ver a los detenidos.
“No nos permiten acercarnos; nos mandan de una entrada a otra. Vamos a ir a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que se nos permita tener acceso e interponer un amparo contra la privación al derecho de una defensa legítima”, indicó uno de los familiares.
Además de Tamayo Díaz y Barrera Maya, otros de los presentados ante el MP federal son Ángel Martínez Mora, Juana Guadalupe Guerrero Ruiz, Agustín Vera González, Miguel Hernández Amador y Martha Espinoza Martínez.