En picada, la fortuna de Carlos Slim

Con la implementación de las nuevas reglas de competencia en el sector de telecomunicaciones en México, la suerte de América Móvil (AMX) cambió. La empresa del magnate mexicano Carlos Slim experimentó una sacudida operativa y financiera de la que, a la fecha, no sólo no se ha podido recuperar, sino que aún faltan algunos capítulos por escribir.

Al cierre del segundo trimestre del 2016, la fortuna del empresario se ubicó en 1.28 billones de pesos, nivel que no se apreciaba desde el cuarto trimestre del 2009. Cabe recordar que dicho valor ha estado condicionado por la evolución de AMX en el mercado de acciones, cuyo precio se ha ubicado recientemente por abajo de los 11 pesos, cotización que igualmente no se observaba desde el 2009, de acuerdo con el Índice Slim, elaborado trimestralmente por la Unidad de Inteligencia y Estudios Especiales de El Economista (UIEE).

Esta caída en el precio de las acciones de AMX provocó más que una abolladura a la corona de Slim. La regulación al sector de telecomunicaciones le arrancó una gema importante en el control y valorización de los mercados en los que opera, particularmente en México y Brasil.

En diciembre del 2012, su fortuna alcanzaba los 1.74 billones de pesos (equivalente a 47% del presupuesto total del país en ese año), mientras que, para el cierre del segundo trimestre del 2016, el valor de mercado de la misma alcanza los 1.28 billones de pesos, es decir, una disminución de casi medio billón de pesos, de los cuales AMX aportó poco más de 80 por ciento.

Un dato más: en diciembre del 2012, AMX representaba 65% del valor de mercado de la riqueza de Slim; para el cierre de junio de este año, aporta 58 por ciento. En este mismo lapso, la pérdida de 77% en el valor de mercado de Minera Frisco destaca también, pues de un valor de mercado de 138,571 millones de pesos pasó a 31,435 millones de pesos en el mismo lapso de tiempo. Sin duda, la desaceleración económica y la caída en el precio de los metales preciosos y los industriales impactaron sus resultados.

También en el grupo de los negocios perdedores, entre diciembre del 2012 y junio de 2016, Grupo Financiero Inbursa experimentó una caída en su valor de mercado de 21%, es decir, una baja de 54,736 millones de pesos. En contraste, Impulsora del Desarrollo y el Empleo en América Latina (IDEAL), a la que en el 2013 los grandes proyectos de infraestructura del gobierno catapultaron de forma tal que casi duplica su valor, ya al concluir el segundo tercio de este año, alcanzó un valor de 80,164 millones de pesos, un incremento de 13% respecto del cierre del 2012.

Aunque Carlos Slim no es propietario del total de las acciones de las empresas del 
Índice Slim, sí incide de manera importante en el diseño de sus estrategias de inversión.

Fuente: El Economista