México se mantiene como un importante productor de mariguana y ha incrementado significativamente su participación en el cultivo mundial de amapola, advierte un informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) difundido ayer, reportó la Agencia Reforma.
En 2013, estima, se cultivaron en el País alrededor de 13 mil hectáreas de mariguana y fueron erradicadas 5 mil 734.
En tanto, señala, la superficie cultivada con amapola pasó de 3 mil 300 hectáreas en 2005 a 14 mil en 2010 y a 24 mil 800 en 2015.
De esta forma, México participa con 9 por ciento de la superficie dedicada al cultivo de la amapola a nivel mundial, detrás de Afganistán, que concentra 66 por ciento y de Myanmar, con 20 por ciento.
La “epidemia” de heroína y de otros derivados del opio en Estados Unidos, que está en su nivel de consumo más alto en los últimos 20 años, ha disparado el cultivo de amapola en México hasta convertirlo en el tercer país del mundo por plantaciones, indicó Angela Me, responsable del Informe Mundial sobre Drogas 2016.
El reporte estima que en 2015 México tenía una capacidad para producir 475 toneladas de goma de opio, materia prima para la elaboración de la heroína y otras drogas, mientras que en 2000 se estimaba que podía producir 21 toneladas de esta sustancia.
En cuanto a la cocaína, el informe señala que el suministro hacia Estados Unidos y Canadá ha caído debido a una reducción de la producción de la droga en Colombia y a la violencia relacionada con los cárteles de la droga en México.
Esto, se afirma, ha provocado un ajuste de precios y una reducción del consumo. En Estados Unidos se registró un descenso de 32 por ciento en el uso de cocaína de 2006 a 2014, mientras que las muertes relacionadas con el consumo de esa droga disminuyeron 34 por ciento entre 2006 y 2013 (el último dato oficial disponible).
Asimismo, el número de personas en tratamiento por adicción a la cocaína cayó 54 por ciento entre 2006 y 2012 y el número de trabajadores que dieron positivo en presencia de cocaína en pruebas de orina bajó 66 por ciento entre 2012 y 2014.
De cualquier manera, en el reporte se afirma que las organizaciones criminales mexicanas continúan dominando las rutas del tráfico de cocaína desde Sudamérica hasta Estados Unidos y Canadá, pasando por Centroamérica, e incluso han suplantado a organizaciones de tráfico locales.
Por no criminalizar
En su informe, la UNODC respalda el planteamiento de no llevar a prisión a consumidores de drogas.
“La primera opción para las personas con trastornos por uso de drogas debería ser una alternativa al encarcelamiento.
“Enfoques para hacer frente a delitos menores relacionados con trastornos por consumo de drogas a través de tratamiento y la atención como una alternativa a la prisión requiere una coordinación eficaz entre los sistemas de salud y justicia”, señala en el reporte.