Este año, el primer socio de Pemex

Ante las restricciones presupuestarias que enfrenta Petróleos Mexicanos (Pemex), la exploración petrolera y, por tanto, la tasa de restitución de reservas, se reducirán aun más en los próximos meses, en tanto que la estatal elabora un nuevo plan de negocios con metas ajustadas a los nuevos niveles del precio del petróleo, anticipó José Antonio González Anaya, director general de Pemex.

Asimismo, se trabaja en más modificaciones al plan pensionario para sus trabajadores que le permitan reducir su carga de pasivos, en espera de que este año sea anunciado el primer farmout con un privado para extracción petrolera, reveló el funcionario en entrevista con El Economista.

—¿Cuáles son las metas de Pemex para el 2018 en sus grandes renglones operativos, producción restitución de reservas, de petrolíferos, etc.?

Una de las cosas que queremos trabajar es la actualización de un plan multianual con base en el nuevo entorno de precios, porque se han hecho planes multianuales antes; con esta nueva perspectiva de precios queremos actualizar esto. Cualitativamente queremos estabilizar la plataforma, ésa sería una meta, pero yo creo que lo importante es que, si utilizamos todas las flexibilidades de la reforma energética, yo creo que se pueden alcanzar cosas que bajo las reglas del juego anteriores serían imposibles. Va a depender de la profundidad y velocidad con que queramos hacerlo.

—¿Tendremos noticias este año sobre las asociaciones con privados?

Sí, lo que yo puedo decir es que estamos redoblando esfuerzos y haciendo lo mejor posible para acelerar este proceso. Estamos conscientes de qué es lo que tenemos que hacer. Yo creo que debemos empezar a ver que esto se está moviendo en el transcurso del año; hacia finales del año estos procesos ya deben ser públicos, no de repente sales y existe un farmout, pero antes de que concluya el año habrá noticias sobre estos procesos.

—Se adelantó la libre importación de combustibles este año. ¿Cuál será la estrategia de Pemex en el tema de almacenamiento?

Pemex va a ser, no sólo en este mercado de gasolinas, sino en todos, un competidor amigable. ¿Qué quiere decir esto? Que estará jugando un papel importante en el mercado de hidrocarburos, pero como empresa productiva del Estado tiene un segundo objetivo: promover el desarrollo del sector energético del país; así que no hay una receta, se seguirán diferentes caminos, en algunos lugares estaremos solos, en otros nos asociaremos. No tenemos mucha capacidad sobrante, si tuviéramos, consideraremos los esquemas, pero no tenemos mucha.

—¿Qué avances y obstáculos se enfrentan en el tema de pago a proveedores?

Yo creo que en el pago a proveedores vamos avanzando bastante. Primero, en el tema del crédito para pagarle a 85% de los proveedores, pero ahora, con las medidas de apoyo del gobierno federal, hemos tenido un avance enorme: al 30 de abril logramos pagar 92,000 millones de pesos, y en las próximas semanas pagaremos otros 25,000 millones. Lo importante es que pensemos que esto es revolvente, por lo que yo ya no veo esto como un tema, vamos a seguir pagando deudas anteriores, se va a seguir generando un nuevo pasivo y lo vamos a seguir pagando. Ese tema está en proceso de estar casi resuelto.

—¿Cuál será la estrategia de producción en campos como Ku Maloob Zaap y Cantarell, que ya van de salida?

Sobre los campos que tanto le han dado al país, lo que vamos a buscar es cuidarlos, darles el mantenimiento que se les tiene que dar para alargar su vida productiva lo más posible, para lo cual utilizaremos las tecnologías que tenemos y otras nuevas, para tratar de mejorar la producción. Todo el tiempo estamos en exploración, nada del tamaño de Cantarell y Ku Maloob Zaap, pero estamos integrando campos para tratar de reponer la reserva.

—¿De cuánto espera que sea la incorporación de reservas este año?

No lo sabemos aún. Pero sí puedo anticipar que va a ser un número comparativamente menor al de los años anteriores, porque este año, debido al ajuste, estamos buscando precisamente que estas labores de exploración se hagan con las nuevas figuras.

—Aunque el año pasado la tasa de restitución se desplomó a 10 por ciento…

Habrá que ver los números, pero una parte importante del ajuste viene de la actividad de exploración.

—¿Qué tan viable es que los contratistas pasen a ser socios de Pemex?

Es parte de la transformación, todos estamos aprendiendo de la reforma energética y algunos lo harán más rápido que otros. Yo creo que sí existe esa posibilidad y, en mayor o menor medida, estas cosas van a ir ocurriendo.

—¿En la renegociación de contratos, por ejemplo, en plataformas, adónde los llevará el ajuste presupuestario este año?

Son ajustes importantes, grandes, pero estamos tratando de llevarlos de la manera más transparente y equitativa posible. Los precios se han seguido ajustando. Hemos ido caminando con los proveedores, tenemos una meta interna para poder mantener la mayor parte, como dijimos. El objetivo del replanteamiento de las inversiones era sacrificar lo menos posible la producción a futuro.

—¿Cómo va a terminar el esquema pensionario de Pemex?

Los grandes acuerdos se dieron antes de que yo llegara, pero estamos trabajando en la implementación, que sea de la manera más limpia, y en estas cosas no es un juego de suma cero, sino que también beneficie a los trabajadores. Utilizaremos algunos de los conocimientos que tenemos para tratar de aterrizar esto de la mejor manera posible. Ya se estableció que los trabajadores nuevos entren en un esquema individual de pensiones, los que ya estaban se quedan con el que están, aunque se les da la posibilidad de migrar. Realmente es un juego de detalles que está en su etapa de ajustes, todavía no hay una fecha para definirlos, pero será pronto.

—¿De qué tamaño debe ser la plantilla de trabajadores para que Pemex sea productiva?

La deseable, la deseable. Ni un trabajador más ni un trabajador menos. Con el sindicato y su dirigencia tenemos una relación buena y constructiva.

Fuente: El Economista