
Por Jordana González, Jorge Baca, Marcial Yangali y Nancy Flores para Contralínea
La auditoría interna 2015, que reveló la participación del ex Presidente Fox en actos de corrupción, desapareció de la Secretaría de la Función Pública. Roberto Muñoz Leos, el auditor a cargo, señala en entrevista que el ex mandatario ordenó directamente acciones anómalas.
El archivo –de 365 fojas y del que Contralínea sí tiene copia– documentó tráfico de influencias, adjudicaciones directas, subcontrataciones, pagos anticipados, sobreprecios, incumplimientos, duplicidad de convenios y triangulación del gasto público durante la remodelación de Los Pinos. La pérdida de ese expediente afecta la memoria histórica de México y es una violación al derecho humano a saber, señalan expertos en derecho.
La Secretaría de la Función Pública (SFP) extravió de su archivo histórico la auditoría 2015 que documentó la participación del ex Presidente Vicente Fox Quesada en actos de corrupción ocurridos a inicios de su Gobierno, durante la remodelación de la residencia oficial de Los Pinos: residencia Miguel Alemán, cabañas 1 y 2, obras exteriores y casa anexa, con un costo para el erario de más de 61 millones de pesos.
En respuesta a la solicitud de información 0002700068419, hecha por Contralínea, la institución que encabeza la doctora Irma Eréndira Sandoval admite que “tras el procedimiento de búsqueda en sus archivos físicos y electrónicos”, ni la Unidad de Auditoría Gubernamental (UAG), ni la Unidad de Control y Auditoría a Obra Pública, ni la Dirección General de Auditorías Externas, ni el Órgano Interno de Control en la Presidencia de la República “cuentan con expresión documental que otorgue respuesta a lo solicitado”.
Según su argumento, la ausencia del expediente se debe a “que no se ha realizado auditoría por parte de la Secretaría de la Función Pública respecto de los contratos AD009-01, AD267-00 y AD268-00 para la remodelación de Los Pinos durante el sexenio de Vicente Fox”.
Pero esa fiscalización sí se realizó y este semanario conserva copia del exhaustivo expediente, que en sus 365 fojas da cuenta de diversas anomalías, como adjudicaciones directas, tráfico de influencias en beneficio del arquitecto Humberto Artigas –amigo de Fox–, subcontrataciones, pagos anticipados pese a que no se celebraban aún los contratos, sobreprecios, incumplimiento y duplicidad de convenios, triangulación del gasto público, falta de entrega de bienes, objetos entregados no requeridos, y opacidad en la adquisición de enseres. [ Fox: irregularidades millonarias en remodelación y adquisición de bienes para Los Pinos ]
En entrevista con Contralínea, el contador público Roberto Muñoz Leos –quien estuvo al frente del equipo de auditores que fiscalizaron las obras de la remodelación– explica que esa acuciosa investigación se realizó en 5 días hábiles por las presiones que enfrentó la entonces Secretaría de Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam, hoy Función Pública), a cargo de Francisco Barrio Terrazas.
“Ese caso fue un trabajo muy al principio del sexenio de Fox y si el poder del presidente era grande, el de Marta [Sahagún] era más”, señala el auditor con experiencia de más de 30 años de servicio en áreas de supervisión del ejercicio público.
Muñoz Leos, quien en el sexenio de Fox se desempeñó como director general de Auditoría Gubernamental de la Secodam, revela cómo fue la participación directa del ex Presidente en las anomalías: “Fox dice que fue el primer asunto que se utilizó para golpearlo, pero no se le golpeó a él, se golpeó su administración porque la persona que él puso [Carlos A Rojas Magnon] a administrar [las obras de remodelación] empezó por nombrarse a sí mismo, prueba de que no sabía de qué estaba hablando pero era el señor jefe y ese tipo de cosas las encontramos muy seguido”.
El ex contralor de la extinta Conasupo (cargo desde el cual documentó irregularidades de Raúl Salinas de Gortari), del Bancomext y de la Conapred –por mencionar parte de su trayectoria profesional– recuerda que para hacer esta auditoría se “reconstruyeron las acciones” a partir de interrogatorios a todos los involucrados, incluidos albañiles, porque el Gobierno panista no tenía registros de contabilidad. “No hubo manera de revisar documentación porque no había documentación de muchas cosas”.
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Source: Mexico





