De enero a octubre del presente año, los consumidores de gasolina han pagado al fisco casi 70 mil millones de pesos más de lo que las coberturas petroleras han aportado al Estado mexicano, informó Excélsior.
Datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dan cuenta de que el impuesto a los combustibles ha recaudado 176 mil 153.6 millones de pesos en
dicho lapso.
En tanto, el monto en dólares de las coberturas petroleras del 1 de diciembre de 2014 al 30 de noviembre de 2015, y recibidas el pasado 7 de diciembre, equivalen a unos 106 mil millones de pesos, al tipo de cambio del día en que se recibieron, de acuerdo con cálculos de la dependencia.
En otro comparativo, destaca que la carga tributaria impuesta a los automovilistas durante los primeros diez meses del presente año fue mayor a los 70 mil millones de pesos extra, los cuales equivalen apenas a 40% de la recaudación del IEPS gasolinero en el periodo.
La efectividad de dicho impuesto se refleja en que la recaudación tuvo un alza de 481 por ciento. En la Ley de Ingresos 2015, se calculó que la obtención por el IEPS aplicado a gasolinas sería de 30 mil 321 millones de pesos en el presente ejercicio fiscal. Sin embargo, hasta el momento ha generado más de 176 mil millones de pesos.
De enero a octubre de 2015, el ingreso por combustibles supera a los 27 mil mdp presupuestados para el año
Los consumidores de gasolina le pagaron casi 70 mil millones de pesos más al Estado mexicano del que le aportaron a éste las coberturas petroleras de 2015, según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Estadísticas Oportunas de Finanzas Públicas, elaboradas por la dependencia, refieren que de enero a octubre de este año, la recaudación del IEPS aplicado a gasolinas sumó 176 mil 153.6 millones de pesos.
Por su parte, el monto en dólares de las coberturas petroleras recibidas el 7 de diciembre pasado equivale a unos 106 mil millones de pesos, al tipo de cambio del día en que se recibieron, de acuerdo con estimaciones de la dependencia.
Las cifras oficiales revelan que de enero a octubre de este año los consumidores de gasolina aportaron al Estado mexicano casi 70 mil millones de pesos más que las coberturas petroleras del 1 de diciembre de 2014 al 30 de noviembre de 2015.
Sin embargo, la carga tributaria impuesta a los automovilistas durante los primeros diez meses del año fue mayor que esos 70 mil millones de pesos, los cuales equivalen apenas a 40 por ciento de la recaudación del IEPS gasolinero en el periodo.
En la Ley de Ingresos 2015, se estimó que la recaudación por IEPS aplicado a gasolinas sería de 30 mil 321 millones de pesos en el presente ejercicio fiscal. Sin embargo, de enero a octubre generó 176 mil 153.6 millones de pesos, 481 por ciento más.
La mayor recaudación se explica porque el Estado mexicano mantiene el monopolio de distribución y venta de gasolina, lo que le permite fijar y controlar el precio en función de sus necesidades de ingreso, no de las leyes del mercado.
Así, aunque el precio internacional del petróleo y de sus derivados baja, mantiene los internos en un nivel más alto respecto al de los globales, para incrementar la recaudación y compensar la caída en ingresos petroleros.
Pese a que México es productor de petróleo, importa gasolina que, en la coyuntura actual, adquiere a un precio internacional menor pero vende a un precio doméstico más alto respecto a los que pagó y vendió un año antes.
Así, la brecha cada vez más amplia entre el precio al productor, que es el que paga Pemex en el mercado internacional, y el precio al consumidor final, que es el que impone el Estado mexicano en el mercado doméstico, genera un crecimiento en la recaudación del IEPS aplicado a gasolinas.
Los datos revelan que los consumidores de gasolina cargaron con la mayor parte del peso de la disminución del precio del petróleo y de los ingresos petroleros, los cuales son compensados parcialmente con la recaudación del IEPS gasolinero.
Cabe mencionar que en los últimos días, los precios internacionales del petróleo han registrado precios mínimos, como la mezcla mexicana, que está en mínimos desde diciembre de 2008.