Ávila Domínguez ya había sufrido un atentado el pasado 29 mayo en el centro, cuando su automóvil fue interceptado por hombres armados a bordo de una motocicleta. El oficial resultó herido pero logró escapar.
El comandante de la Policía Preventiva, Juan Ávila Domínguez, fue asesinado a balazos por hombres armados ayer por la mañana, después de dejar a su hija en una primaria de la colonia Bella Vista.
Asimismo un hombre fue hallado muerto dentro de la cajuela de un taxi colectivo, en la avenida Lázaro Cárdenas.
Y un hombre fue asesinado a balazos en la comunidad Cerrito de Oro, en Coyuca de Benítez, ayer al mediodía.
A las 7 de la mañana, fue acribillado el comandante de la Policía Municipal, Juan Ávila Domínguez, entre la Calle 6 y la avenida Guerrero, de la colonia Bella Vista, a unos 20 metros de la escuela primaria Rubén Mora Gutiérrez, donde minutos antes dejó a su hija.
Según los informes preliminares, dos hombres a bordo de una motocicleta le dispararon a Ávila Domínguez cuando éste al parecer salía de la escuela, lo que causó pánico entre los padres de familia que se llevaron a sus hijos.
Minutos después, familiares del policía, que recibió cinco disparos a la cabeza, acudieron al lugar donde encontraron el cuerpo tirado a mitad de la calle, por lo que se lo llevaron a su casa, ubicada en la misma colonia Bella Vista.
Según las autoridades, el comandante, conocido como El Kalucha, portaba un arma que no logró sacar cuando fue atacado y los agresores se llevaron un bolso de la víctima.
Durante las diligencias realizadas por un agente del Ministerio Público y un perito de la Fiscalía Regional, fueron hallados siete casquillos percutidos y una ojiva.
Ávila Domínguez ya había sufrido un atentado el pasado 29 mayo en el centro, cuando su automóvil fue interceptado por hombres armados a bordo de una motocicleta. El oficial resultó herido pero logró escapar.
El nombre del comandante Juan Ávila apareció en dos narcomantas, una de ellas colgada el 7 de septiembre en el puente Bicentenario, en la avenida Cuauhtémoc, junto con los de otros policías ministeriales y municipales, además el del fiscal general Miguel Ángel Godínez Muñoz, y todos eran señalados por cobrar cuotas y recibir dinero del crimen organizado.
La otra manta fue colgada el 23 de junio en el puente peatonal de la colonia Garita.
Ávila Domínguez era policía activo de la Asamblea de Policías y participó desde el primer paro laboral que hicieron los agentes el 18 de abril del año pasado, en demanda de mejores condiciones laborales y la destitución del entonces secretario de Seguridad Pública, Alfredo Álvarez Valenzuela, quien finalmente renunció 23 días después.
El 10 de mayo los agentes dieron por concluido el paro.
En lo que va del año han sido asesinados cuatro comandantes, tres de la Policía Preventiva y uno de la Vial, y de éstos dos casos han ocurrido en las primeras dos semanas de la administración perredista.
El sur de Acapulco