Una protesta ciudadana a la que se convocó para repudiar el alza a los impuestos estatales y la gasolina derivó en violencia cuando un grupo de jóvenes, algunos de ellos encapuchados, intentó derribar el portón de palacio de gobierno y quebró los cristales de la fachada, informó Proceso.
Desde adentro del inmueble donde despacha el gobernador Jaime Rodríguez Calderón, los policías estatales repelieron a los manifestantes con líquido pimienta, mientras una parte de las aproximadamente 20 mil personas reunidas en la Macroplaza gritaban: Fuera El Bronco, Fuera Peña Nieto.
La manifestación, la más numerosa efectuada en la administración de Rodríguez Calderón, inició a las 17:00 horas con caravanas de autos que partieron de diversos puntos de la zona metropolitana.
Una hora después, el evento al que convocó Gilberto Lozano, presidente del Congreso Nacional Ciudadano, se salió de control cuando un grupo de jóvenes colocados frente al templete demandó la palabra, pero al recibir una negativa quiso tomar por la fuerza el micrófono.
Cuando los muchachos tomaron el escenario, luego de que se bajaron los organizadores, alcanzaron las vallas metálicas de la policía y las utilizaron como arietes para intentar derribar el portón de palacio de gobierno, pero sólo lograron romper los cristales de la fachada.
Dentro de la sede se encontraba el secretario de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Antunez, quien coordinaba el operativo para repeler a los agresores. Hasta las 19:30 horas no se habían reportado personas lesionadas ni detenidas.