El gobierno mexicano se alista para recibir en el nuevo hangar presidencial el moderno TP-01, bautizado como José María Morelos y Pavón, el cual arribará entre la segunda y tercera semana de diciembre, informa Plano Informativo.
El avión, que actualmente se encuentra en los hangares de la compañía Associated Air Center, en Love Field, Dallas, en Estados Unidos está listo y sólo se le hacen ajustes mínimos a su interior y exterior, en pintura.
Fuentes de Boeing comentaron a Excélsior que el avión TP-01, un Dreamliner 787 está siendo remodelado por alrededor de diez millones de dólares en Associated Air Center, y que ya no regresará a Seattle, a los hangares de la fabricante de aviones, debido a que ya fue entregado finalmente al gobierno mexicano.
Aseguran que está listo para su arribo al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México o Santa Lucía el próximo mes, entre los días 15 y 18 de diciembre.
La negativa a la venta
Desde Seattle, donde se encuentran las oficinas de Boeing, se dio a conocer que el avión, como se recordará, se vendió por 139 millones de dólares al anterior gobierno, lo cual fue un precio extraordinario, pues se compró en paquete con los que se le han estado entregando a Aeroméxico, quien adquirió diez Dreamliners semejantes.
Las fuentes confirmaron a este diario que personal del gobierno federal tuvo acercamientos con Boeing para analizar una posible venta de la aeronave antes de su entrega, pero que se desencantaron de la idea una vez que supieron las pérdidas que podrían tener al tratar de traspasarlo a otro cliente.
“Hubieran perdido alrededor de 30 millones de dólares de haberlo vendido en las actuales condiciones, pues ya estaba modificado en su interior, ya tenía horas de uso, además de que es difícil encontrar un cliente que busque un avión semejante. Al enterarse de ello, decidieron no vender. México hubiera tenido que perder 25 millones de dólares en ingeniería que se trabajó al interior en temas de seguridad y especificaciones internas, más otros cinco o diez millones en recubrimientos, pintura, asientos y estética”, comentaron las fuentes.
Personal de Associated Air Center, que también solicitó su anonimato por temas de confidencialidad con el gobierno mexicano, aseguró que se cobraría 15 millones por reequipar la aeronave, más de medio millón de dólares por volver a pintarlo.
“A eso, habría que sumar el pago de un dos por ciento de la venta total a un broker que se encargará de hacer la transacción entre el vendedor y el comprador”.
La mejor idea
En Boeing aseguraron que ahora el gobierno mexicano tiene dos meses para capacitar a sus pilotos que manejarán la aeronave, pues necesitan certificarlos internacionalmente ante las autoridades correspondientes, y que para ellos Aeroméxico juega un papel importante.
“Ya se inauguró en las instalaciones de Aeroméxico Capacitación, en la Ciudad de México, el simulador de vuelo del Dreamliner 787, con el cual se va a entrenar a los pilotos. Se espera que inicien su curso este fin de semana. Además, hay que tomar en cuenta que la edificación del nuevo hangar presidencial, que se entrega a finales de este mes, era otro gasto que se iba a
perder.
“ Además, hay que recordar que quien compró la aeronave fue la administración de Felipe Calderón, y no la de Peña Nieto”, comentaron desde
Seattle.
Por su parte, fuentes de la línea Aeroméxico confirmaron que el avión llegaría a mediados de diciembre, pues es el acuerdo que se tiene con autoridades del Estado Mayor Presidencial.
“Se supo de la idea de vender el avión, pero quedó rápidamente descartada cuando se supo los costos, pues el TP-01 entra en la categoría de Privados, en Associated Air Center, y sería muy caro para el gobierno pagar por reconfigurarlo a su forma original”, señalaron en la línea aérea.
Recordaron que un avión con las características del Dreamliner 787 tiene la capacidad de realizar vuelos con la máxima seguridad y hacer viajes transatlánticos sin necesidad de escalas.
A diferencia del anterior modelo, éste representa ahorro de combustible y mayor confort para los pasajeros; pueden viajar 290 personas.
Pérdidas si se vende el avión
25 millones de dólares por reingeniería.
Cinco millones de dólares por asientos y estética interna.
15 millones de dólares costaría al comprador reequiparlo de origen, pues ya fue modificado.
500 mil dólares por volverse a pintar, ya que la areronave ya tiene los colores de la bandera en la cola.
Dos por ciento de la venta total para el broker que se encargaría del proceso de la compra-venta.