Luis Jorge Talavera cayó en depresión desde principios de este año cuando su padre murió por diabetes. Dejó de asearse y de comer al punto que sus vecinos en la colonia Isidro Fabela, en Tlalpan, lo veían como un indigente.
El miércoles lo vieron por última vez. Ahora, la policía lo busca como el principal sospechoso del asesinato de su madre, quien fue encontrada semienterrada en la sala de su casa.
El viernes, una mujer se presentó ante el Ministerio Público para denunciar la desaparición de su hermana, María de Lourdes Recoder Núñez, de 56 años, a quien dijo, no veía desde abril pasado.
Dijo que temía por su vida pues su sobrino se la negaba cada que ella le llamaba por teléfono: primero decía que no quería hablar y después que había salido de viaje aTamaulipas. El miércoles él dejó de responder el teléfono.
El sábado al mediodía, acompañada de agentes de la Policía de Investigación y bomberos, se presentó a la vivienda ubicada en el número 51 de la calle Oriente 7, esquina con Norte 1, en la colonia Isidro Fabela.
Al ingresar vieron la casa en desorden y en el área de la sala comedor detectaron un bulto cubierto con tierra. Parecía que alguien hubiera excavado.
Los bomberos removieron la tierra y descubrieron el cuerpo de una persona envuelto en cobijas y amarrado con cable. Era el de María de Lourdes, quien tenía aproximadamente un mes de haber muerto.
La hermana de la víctima dijo a los agentes que sospechaba de su sobrino pues había cambiado mucho tras la muerte de su padre a consecuencia de la diabetes.
Uno de los vecinos, dijo que lo habían visto por última vez el martes o miércoles, que solían verlo salir a la tienda a comprar cigarros, cada vez más sucio y flaco, como si no se bañara ni comiera.
Con ayuda de bomberos, el cadáver fue trasladado al anfiteatro de la Fiscalía Desconcentrada en Tlalpan para ser sometido a la necropsia que revelará la causa de la muerte.
Hasta ayer por la tarde, el hijo de la víctima y considerado principal sospechoso del crimen, no había sido localizado.
El Gráfico