Paro indefinido en todas las escuelas de educación básica en BC

Insuficiente y limitadas y por tanto con pobres resultados hasta ahora, han sido la gestiones de las autoridades educativas en el Estado. Se nos ha invitado al diálogo y se ha dado, pero no han habido nada tangible que ofrecer. Ante eso la Sección 2 del SNTE dio un paso adelante en los paros escalonados y a partir de este lunes 20 de abril el paro de labores será completo y en forma indefinida en todas las escuelas de educación básica, preescolar, primaria y secundaria.

No nos han dejado otra alternativa que exigir por estas vías lo que le corresponde a los trabajadores por el trabajo que ya han cumplido y no ha sido pagado. Insistimos no pedimos nada que no hayamos devengado. La exigencia es llana y simple: que se pague a los trabajadores lo que se les debe, precisó el Secretario General de la Sección 2 del SNTE, maestro Rogelio Alejandro Gudiño Valenzuela.

Esto es lo que se debe, recordó el dirigente magisterial: 353 millones de pesos por primas de antigüedad no cubiertas a 750 maestros jubilados desde octubre del 2013 y todo el 2014; 222 millones de diferencial de retiro y ayuda humanitaria a jubilados y pensionados; 300 millones por interinatos y problemas de pago.

A la Sección 37 y al SETE se les deben otros 431 millones de pesos a interinos; 1 mil millones de prima de prima de antigüedad del gran pendiente por las 2,400 jubilaciones y pensiones en lista de espera; 1 mil 100 millones de pesos para pensiones que requerirá el ISSSTECALI a lo que se les deben sumar 2,900 millones que el Estado le debe al Instituto de Seguridad Social. Sumado todo ronda los 6,500 millones de pesos.

Como se observa, hay partes de estos adeudos y compromisos diferidos en muchas ocasiones, que corresponde resolver al Estado y otros a la Federación. La única respuesta que se ha tenido ha sido la emisión de una nómina especial por 24 millones de pesos para interinos de la Sección 37. Una respuesta raquítica e insatisfactoria.

Los maestros ya no están dispuestos a esperar en forma indefinida o conformarse con una promesa verbal o escrita, de lo que se ha tenido y mucho, pero no ha pasado de ahí. Se queda todo en el vacío y a seguir otra vez la espera. Ya no más de ese dulce amargo, señaló el maestro Gudiño Valenzuela.

Reiteró que hay eso sí, el compromiso indeclinable con la educación y en el instante mismo en que se empiecen a liberar los pagos pendientes, en ese mismo instante se vuelve a las aulas y volvió a dejar en claro, que este movimiento no tiene ninguna otra motivación que la exigencia de que se cumplan por parte de la autoridad los compromisos laborales y profesionales que tiene pactados con sus trabajadores.