CIUDAD DE MÉXICO.
De acuerdo con el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2017 el rubro de pensiones y jubilaciones implicará una partida de 720 mil 128 millones 900 mil pesos, 14% más que este año.
La Secretaría de Hacienda explica que desde 1992 el gobierno ha implementado reformas a los sistemas de pensiones, fortaleciendo la solvencia de las finanzas públicas en el largo plazo.
Sin embargo, a pesar de ello y debido a que las reformas se instrumentan de manera gradual, la presión sobre las finanzas públicas se incrementa durante el periodo de transición.
Ello genera que durante este tiempo el gasto en pensiones sea mayor al que se hubiera observado sin reformas.
Se estima que este costo de transición alcance su máximo en 2017, disminuya gradualmente y desaparezca en 2029, señala Hacienda.
Al IMSS e ISSSTE se prevé asignar recursos para pensiones por 540 mil 138 millones; a pensiones del gobierno federal, 90 mil 231 millones y a las empresas productivas del Estado, 89 mil 759 millones.
PENSIONES LLEGAN A TOPE HISTÓRICO
El pago de pensiones y jubilaciones llegará en 2017 a su máximo, al implicar un aumento de 14% respecto del 2016, que significa un pago de 720 mil 128 millones 900 mil pesos, establece la Secretaría de Hacienda en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para el próximo año.
Se estima que este costo de transición alcance su máximo en 2017, disminuya gradualmente y desaparezca (empiece a generar ahorros respecto al escenario inercial) en 2029”, precisa la dependencia.
La Secretaría de Hacienda informa que las pensiones del IMSS y del ISSSTE tendrán un crecimiento por arriba del promedio, pues las pensiones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) representarán en 2017 un pago de 349 mil 333 millones 900 mil pesos; es decir, un aumento de 17.7% respecto a los 296 mil 922 millones 400 mil pesos asignados para este año.
En el caso del ISSSTE, el sistema de pensiones tendrá un aumento de erogaciones de 16.1%, porque pasan de 164 mil 315 millones 500 mil pesos en este 2016 a 190 mil 804 millones 300 mil pesos.
Detalla que las pensiones del gobierno federal pasarán de 87 mil 557 millones 100 mil pesos, que representan en este 2016, a 90 mil 231 millones 700 mil pesos para el próximo año, lo que implica un crecimiento de 3.1% respecto a este año.
El mayor crecimiento es para las Entidades de Control Directo, que son el IMSS y el ISSSTE, porque pasan, juntas, de 461 mil 237 millones 900 mil pesos a 540 mil 138 millones 200 mil pesos.
Y las Empresas Productivas del Estado, que son Pemex y CFE, tendrán un crecimiento de 8.5%, al pasar, juntas, 82 mil 724 millones 100 mil pesos que representan este año, a 89 mil 759 millones de pesos para el próximo año.
Petróleos Mexicanos (Pemex) crecerá 9.7% en el pago de pensiones, pues en este 2016 suman 49 mil 22 millones 700 mil pesos y en 2017 serán de 53 mil 794 millones 900 mil pesos.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) crecerá 5.3% en pensiones, pues los 33 mil 701 millones 400 mil pesos de este año, se elevarán a 35 mil 964 millones 300 mil pesos.
Añade que “los recursos asignados al pago de las pensiones han tenido un crecimiento en términos reales de 80.3% en el periodo 2008-2015”.
Hacienda explica a los legisladores que, desde 1992, el gobierno federal ha implementado una serie de reformas a los sistemas de pensiones, como la del Sistema de Ahorro para el Retiro, en 1992, y la del IMSS, en 1997, fortaleciendo la solvencia de las finanzas públicas y reestructurando la dinámica de gasto en pensiones a cargo del gobierno federal.
Además, estas reformas han contribuido al desarrollo del ahorro nacional y a la profundización de los mercados financieros”, dice.
Reconoce, sin embargo, que “a pesar de este esfuerzo, y debido a que las reformas al sistema de pensiones se implementan de manera gradual, y como ya se pudo observar, el pago de pensiones registra un incremento importante asociado principalmente al envejecimiento de la población, la presión sobre las finanzas públicas se incrementa durante el periodo de transición, porque los recursos que se aportan en las cuentas individuales (alrededor de 1% del PIB en 2015) no se pueden utilizar para pagar las pensiones en curso de pago, dado que los recursos se ahorran para fondear las pensiones de la siguiente generación.
Este último elemento genera que durante un periodo de transición el gasto en pensiones observado sea mayor al que se hubiera visto sin reformas. Se estima que este costo de transición alcance su máximo en 2017, disminuya gradualmente y desaparezca (empiece a generar ahorros respecto al escenario inercial) en 2029”, informa.
FUENTE: Excélsior