Privilegios para diputados y senadores, despidos para los maestros

Hablemos claro: con estos despidos punitivos el gobierno pretende acabar con las protestas contra la reforma educativa. Los maestros no tenemos privilegios. Los únicos privilegiados son los funcionarios que ganan millones por legislar contra el pueblo trabajador, y los empresarios que viven del trabajo ajeno.

Veamos. Cada senador de la república tiene en 2016 un salario anual de $1,925,945. Son 128. Por su parte cada diputado, cuenta con un salario anual de $ 1,432,997.

Mientras tanto, una maestra al frente de grupo de 40 alumnos o más tiene un sueldo anual de $87,883.8, que equivalen aproximadamente a $7,323 por mes. Con la reforma educativa, a la falta número cuatro, según Aurelio Nuño, estos maestros quedarán despedidos. Es el criterio que aplicó para anunciar los despidos de 4,243 maestros de Guerrero, Michoacán y Oaxaca, todos compañeros que han participado del paro contra la reforma educativa y la evaluación punitiva.

Senadores y diputados faltistas

Hay dos periodos de sesiones ordinarias de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión: del 1 de septiembre al 15 de diciembre y otro del primero de febrero al 30 de abril. O sea, en total, hablamos de 6 meses y medio de “labor”.

Pero esto no es todo: tienen cuatro meses de vacaciones entre un periodo y otro…pagadas a cargo del erario público.

Aun cuando existen las sesiones extraordinarias que se pueden convocar en el periodo vacacional o en los días feriados dentro de los periodos ordinarios, esto en nada influye.

Según un informe de la Unidad de Periodismo de Datos de El Universal, sólo durante el primer periodo de sesiones de 63 Legislatura, 618 diputados pidieron permisos para faltar al pleno. Encabeza los pedidos el Partido Acción Nacional: 70% de los miembros de su bancada lo solicitaron. Y se los otorgaron. Evitaron el descuento de $2,460 cada dos días.

El salario mínimo está hoy en $73.04 por día, $2,191.2 por mes. O sea, los diputados faltistas evitaron el descuento de un poco más de un salario mínimo cada dos días de permiso.

A su vez, hubo 367 diputados que faltaron de una a 17 veces durante el mismo periodo de sesiones y siete de cada diez lo hicieron a través de estos permisos.

Entre los faltistas se cuentan: David Jiménez Rumbo (PRD), Javier Santillán Oceguera (PRI), María Concepción Váldez Ramírez (PRD), Armando Soto Espino (PRD), Luis Maldonado Venegas (PRD), Norberto Antonio Martínez Soto (PRD), Rosalinda Muñoz Sánchez (PRI) y Virgilio Mendoza Amezcua (PVEM).

Por su parte, en el Senado, en el primer periodo de sesiones hubo 188 faltas “justificadas”. Destacan Braulio Manuel Fernández Aguire (PRI), Joel Ayala (PRI), Ninfa Salinas (PVEM), Fernando Yunes (PAN), Ana Gabriela Guevara (PT), René Juárez Cisneros (PRI), Rabindranath Salazar Osorio (PRD), Iris Vianey Mendoza Mendoza (PRD) y María Marcela Torres Peimbert (PAN) entre los faltistas.

Pero es un misterio cuál es la justificación de esas faltas. Ellos mismos se las autorizan. A ellos no les descuentan ni los corren por faltar. ¿Quiénes son los privilegiados entonces?

Gobiernan para los poderosos

Ahora bien, no se trata sólo de que no concurren a su “trabajo”. Su labor es legislar, crear leyes, modificarlas y votarlas. Fue el Congreso de la Unión el que votó las reformas estructurales, de las cuales es parte de la reforma educativa.

Legislan –cuando no tienen algo más importante que hacer que estar en el pleno- y cuando lo hacen, crean y modifican leyes que van contra los intereses del pueblo trabajador.

Legislan para las trasnacionales y el imperialismo estadounidense y a cambio reciben generosas “recompensas”: mansiones, dinero, privilegios varios.

¡Que todos los funcionarios sean revocables y ganen lo mismo que una maestra!

El cínico discurso de Aurelio Nuño no tiene ningún fundamento: las y los maestros no tenemos privilegios. Todos los funcionarios de gobierno son los privilegiados, que nos quieren arrebatar hasta el derecho a manifestarnos y a hacer un paro contra la reforma educativa. Por eso sancionan con despidos a nuestros compañeros que se sumaron al paro.

Hoy vienen contra nosotros, pero mañana, pueden avanzar sobre el derecho a huelga de todos los trabajadores. Es necesario rodear de solidaridad la lucha del magisterio contra la reforma educativa. Hay que parar las intimidaciones del gobierno con el desalojo a los plantones y el secuestro de maestro que fueron llevados por la fuerza a sus estados.

Ante las elecciones a la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México, desde la fórmula 5, Anticapitalistas a la Constituyente, proponemos que todos los funcionarios ganen lo mismo que una maestro y que sean revocables.

La Izquierda Diario