En el Senado de la República se proyectó el documental “El poder de la silla”, dirigido por Enrique Osorno y escrito por Andrés Clariond, en donde cuatro ex mandatarios de Nuevo León comparten sus experiencias y los ciudadanos manifiestan su descontento con el gobierno de dicha entidad.
El senador Zoé Robledo Aburto, presidente de la Comisión de Biblioteca y Asuntos Editoriales subrayó: “no hay carrera política que no termine en un fracaso; puede haber un legado, buena reputación, pero todas las carreras públicas son ejercicios en el mantenimiento del poder, y eventualmente terminamos perdiendo el poder”.
Tras la presentación del documental, el legislador dijo que hay similitudes en las entidades federativas, debido a la indignación por el excesivo uso de poder, arrogancia y frivolidad a la que puede llegar un político en su estilo de gobernar.
Agregó que en ese estado, que se caracteriza por la innovación de candidaturas independientes, al lograr la alternancia en las pasadas elecciones. Nuevo León tiene las mismas características del crecimiento de la indignación que estados como Chiapas, derivada particularmente de la corrupción e impunidad, expresó.
El legislador por el Partido de la Revolución Democrática consideró que en México se genera el morbo de escuchar al político hablar en una especie de intimidad, “porque todo lo público se hace a obscuras y todas las decisiones y estilos de vida –de los políticos- se hace tras bambalinas. Somos muy afectos a la opacidad”.
En su oportunidad, la senadora del PRD, Luz María Beristain Navarrete, comentó: “yo me pregunto si no se dieron cuenta de que se ridiculizan un poco con lo que dicen”, porque en el documental los ex gobernadores dicen una serie de cosas que creen que son “normales o naturales”, pero uno percibe todos los excesos que se cometen. Los felicitó porque lograron lo que se propusieron en el documental.
Gabriel Nuncio, productor ejecutivo de “El poder de la silla”, comentó que el mayor reto al realizar la obra fue la edición, ya que se contaba mucha información y se tenía que incluir solamente lo más importante, pues se realizó por el desconcierto que producía la situación política del estado.
Señaló que hacer hablar a los ex gobernadores de Nuevo León, Sócrates Rizzo, Benjamín Clariond, Fernando Canales Clariond y Fernando Elizondo Barragán, fue muy fácil. No había preguntas tan directas para que poco a poco se fueran soltando y dijeran lo que queríamos que dijeran sin que nosotros lo preguntáramos directamente.
A su vez, el productor Juan Ferré F. comentó que además del documental se realizó una serie de cápsulas en las que se le preguntó a los ciudadanos sobre la percepción que tienen acerca de cómo es la política y cómo se utiliza para llegar al poder, en este caso, a la gubernatura del estado.
En la realización del trabajo videográfico, destacó, los ex mandatarios “se soltaron” en sus declaraciones para contar más acerca de sus experiencias durante sus gestiones en la entidad.