El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP), de la Cámara de Diputados, estimó que para 2015 la recaudación por Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) a bebidas saborizadas ascenderá a 18 mil 271.1 millones de pesos (mdp), lo que implicaría una caída de 3.1 por ciento real anual.
Durante 2015, las bebidas saborizadas contribuirán con el 11.4 por ciento del total de la recaudación del IEPS (159,970.6 mdp) y con el 0.9 por ciento del total de los ingresos tributarios (un billón 978 mil 980.6 mdp).
La recaudación del IEPS a las bebidas saborizadas en 2014 representó el 0.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), 17 billones 050 mil 554.6 mdp, y se espera que para el presente año, los ingresos por el cobro de estos impuestos constituyan el 0.1 por ciento del PIB, alrededor de 18 billones 180 mil mdp.
El Centro de Estudios recordó que durante 2014, la recaudación por IEPS a bebidas saborizadas alcanzó un monto de 18 mil 254.9 millones de pesos, cifra que representa el 16.4 por ciento del total de ingresos obtenidos por concepto de IEPS (111,646.8 mdp) y el 1.0 por ciento respecto a la recaudación de los ingresos tributarios obtenida en 2014 (1 billón 807 mil 813.7 mdp).
En el documento “Medidas fiscales y extrafiscales para contrarrestar el consumo de bebidas saborizadas en México”, el CEFP puntualizó que si bien se han implementado estrategias para controlar y prevenir enfermedades derivadas del consumo de refresco y/o aguas saborizadas, aún existen grandes retos.
Precisó que las primeras acciones fiscales para contrarrestar la ingesta de éstas bebidas son: pago de IEPS al consumo bebidas saborizadas, mediante el cobro de una cuota equivalente a $1.00 por litro, así como destino específico de recursos presupuestarios a programas sociales, de salud y educativos como construcción de bebederos en escuelas con alto rezago educativo.
Ante esa situación, se plantea continuar desarrollando e implementando políticas públicas que permitan prevenir y combatir el problema de la obesidad y el sobrepeso en la población en general, siendo una de ellas, reducir el consumo de bebidas saborizadas, una de las principales causas de dichos padecimientos en México.
Otro desafío es destinar mayores recursos del presupuesto para la prevención y control de sobrepeso, obesidad y diabetes, que en 2014 ascendieron a 312.1 mdp, el 0.3 del presupuesto destinado al ramo de salud y 1.8 por ciento del total de la recaudación del IEPS a bebidas saborizadas obtenidas en el mismo ejercicio fiscal.
Ello, con el fin de disminuir el número de personas con sobrepeso y diabetes y reducir el elevado costo social que se deriva del tratamiento y muerte por esta enfermedad, que el año pasado representó el 55 por ciento del presupuesto asignado a salud.
El CEFP relató que en las últimas dos décadas, el consumo de bebidas con alto contenido calorífico se duplicó entre los adolescentes y triplicó en los adultos, lo que explica el incremento desmedido de las personas con sobrepeso.