Para la Arquidiócesis Primada de México, el “voto de castigo” para el Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue “merecido”, pues la sociedad está harta de “la ineficiencia, indolencia, desvergüenza y corrupción”, reportó SDP.
En el editorial del semanario Desde la fe dijo que también fue una manifestación en contra de la propuesta del presidente Enrique Peña Nieto en favor del matrimonio homoparental, a la que calificó de “autoritaria, destructiva e inmoral”.
Para el clero, detrás de esa la iniciativa “hay un intervencionismo extranjero de poderosos lobbys auspiciados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que financian esta perversión de los valores (…) de la familia”.
La Arquidiócesis aminoró su crítica y propuso que a los homosexuales “se les dé una alternativa jurídica para salvaguardar sus verdaderos derechos”.