Científicos estadounidenses encontraron el virus del Ébola vivo en el ojo de un médico que contrajo la enfermedad en Sierra Leona y ya había sido declarado sano, pero rechazaron que su infección ocular represente un riesgo de contagio.
El caso, presentado en la revista especializada New England Journal of Medicine, despertó el interés de los investigadores quienes aseguran que se necesitan más estudios para determinar si el Ébola también puede persistir en otras partes del cuerpo.
El médico paciente, de 43 años, sufrió la picadura de un gusano mientras trabajaba en Sierra Leona y cayó enfermo de Ébola, pero se recuperó de la grave infección tras varias semanas de terapia intensiva.
Sin embargo dos meses después de haber sido declarado libre del virus comenzó a tener una sensación de ardor en el ojo izquierdo y luego a sufrir de vista borrosa y dolor.
Los pacientes con Ébola son generalmente dados de alta una vez que las pruebas demuestran que el virus ya no está presente en la sangre y ya en este punto no se puede transmitir a otras personas, dicen los especialistas.
Pero hay sugerencias que el virus pueda vivir en ciertos fluidos corporales, por ejemplo en el semen de los sobrevivientes algunas semanas después de la recuperación.
Ahora, un equipo de científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad Emory afirman que también persistiría en el ojo y causar más daños.
Los análisis realizados al médico paciente mostraron que el fluido en el ojo izquierdo tenía el virus de Ébola vivo, pero que no había inflamación generalizada que pudiera causar ceguera, por lo que fue sometido a un tratamiento con esteroides y fármacos antivirales.
Tres meses después del tratamiento su visión comenzó a mejorar, refieren los especialistas, quienes ahora consideran que la permanencia del virus podría deberse a la capacidad del ojo para tolerar ciertos patógenos que los afectan.
Los investigadores sugieren que deben realizarse nuevos estudios para comprobar la presencia del Ébola en otras partes del cuerpo, tales como el sistema nervioso central, los testículos y el cartílago.
Además, proponen que se brinde mayor apoyo a los sobrevivientes de la enfermedad en los países más afectados, ya que podrían estar presentando problemas en los ojos u otras dificultades.
Notimex