En el primer año de gobierno de Donald Trump en Estados Unidos, las deportaciones de mexicanos ilegales se duplicarían, alertaron expertos internacionalistas. Lo anterior fue publicado por el diario Publímetro.
El académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), Jorge Durand
advirtió que durante la administración de Barack Obama se deportó a un promedio de 350 mil mexicanos al año y la cifra alcanzaría 700 mil si Trump cumple con el amago de sacar a los connacionales.
Lo anterior, porque durante su campaña, el magnate manifestó que echaría abajo los programas Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA por sus siglas en inglés: Deferred Action for Childhood Arrivals) y Acción Diferida para Padres de Ciudadanos y Residentes Permanentes (DAPA por sus siglas en inglés: Deferred Action for Parents of Americans).
Además de que regresaría a todos los mexicanos que tuvieran pendientes con la justicia por delitos como robo, violación o agresiones, recordó durante el foro “El sistema migratorio regional de cara a la administración de Trump”, realizado en el Colegio de México (Comex).
Al plantear los escenarios posibles en materia migratoria entre Estados Unidos y México, abundó que hay cinco puntos conflictivos que nuestro gobierno debe poner atención.
Estimó que habría problemas logísticos y humanitarios para México con respecto a la migración en tránsito; la ampliación del muro, así como un futuro que “puede ser nefasto” en cuanto a nuevas leyes migratorias punitivas.
Otros dos aspectos serían; un ataque sistemático a las instituciones y organizaciones que apoyan a los migrantes, entre ellas las ciudades santuario o las universidades, al igual que redadas en empresas para detectar trabajadores migrantes irregulares.
Abundó que las medidas drásticas que ha referido Donald Trump no son nuevas, pero en la actualidad habría todo para que se cumplieran, pues hay mayoría republicana en la Cámara de Representantes y en el Senado.
Al respaldo legislativo se suman las organizaciones y asociaciones civiles antiinmigrantes que antes estaban sometidas, pero que ahora pueden desbocarse, por lo que si se espera un peor escenario.