Estados Unidos ha vuelto a llamar este jueves al presidente sirio, Bashar al-Asad, a que deje el poder para poner fin a la crisis del país árabe, publicó HispanTV.
“Es una situación a la que no se puede poner fin mientras Al-Asad continúe en el poder”, ha alegado el presidente estadounidense, Barack Obama, quien se encuentra en Manila, capital de Filipinas, para asistir a la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
El mandatario norteamericano ha destacado que el pueblo sirio es quien debe decidir el destino de Al-Asad, si bien, adelantando juicios, afirma que “los sirios no aceptarán que Al-Asad siga en el poder”.
Obama ha adoptado esa postura días después de que se reuniera con su homólogo ruso, Vladimir Putin, en Antalya (suroeste de Turquía), en el marco de la cumbre de los líderes del Grupo de los 20 (G-20), donde ambas partes abordaron la crisis siria y dieron muestras de acercar posiciones para llegar a un acuerdo.
Durante su estancia en Manila, el presidente estadounidense se reunió el miércoles con su homólogo filipino, Benigno Aquino, y cuestionó a la operación antiterrorista de Rusia en Siria.
Rusia está llevando a cabo a diario decenas de incursiones contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) y otros objetivos terroristas en Siria desde el 30 de septiembre después de una solicitud oficial de Bashar al-Asad.
Por ahora los ataques rusos en Siria, aseguran funcionarios rusos y sirios, han tenido éxito y mejores resultados que los ataques aéreos de la llamada coalición anti-EIIL, liderada por EE.UU., que al parecer ha causado víctimas civiles más que cualquier otra cosa.
La crisis siria, desde su inicio en 2011, se ha cobrado ya la vida de más de un cuarto de millón de personas, de acuerdo con las estadísticas del llamado Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), opuesto a Damasco.