Ante los problemas ambientales que enfrenta la humanidad, como la pérdida de biodiversidad, cambio climático y contaminación, entre otros, el desafío es implementar acciones para abatirlos. Sin embargo, gran parte de las alternativas encaminadas a disminuir ese impacto repercuten de una u otra forma la actividad económica global, como dejar de usar petróleo, señaló Ricardo Barragán Manzo, secretario Académico del Instituto de Geología (IGL) de la UNAM.
A propósito del Día Internacional de la Madre Tierra, que se conmemora este 22 de abril, refirió que “el desafío radica en la sensibilización y educación, así como en la generación y desarrollo de programas de remediación impulsados por países económicamente fuertes, que atenúen el acelerado deterioro ambiental que registra el planeta, en particular durante el último siglo”.
Los cambios climáticos ocurridos en la Tierra a lo largo de millones de años se han dado de manera natural a través del tiempo geológico, dijo. Sin embargo, el deterioro acelerado de nuestro entorno es inducido a partir de la Revolución Industrial, en una escala de tiempo ecológico. Es decir, lo que de manera natural debió ocurrir en dos o tres millones de años, se dio en sólo 100 años. “Ése es el gran peligro, estamos acelerando esos procesos”.
Para la mayoría de los científicos las actividades humanas afectan el clima y hemos rebasado el punto de inflexión. Entonces, el deterioro ambiental alcanzó su punto máximo y ya no hay marcha atrás. Esa visión, remarcó el universitario, es poco proactiva para desarrollar programas remediales.
Como muchos otros expertos en el tema, creo que lo mejor que podríamos hacer es regular el impacto a futuro mediante la adopción de métodos de producción más amigables con el medio ambiente, como la adopción de energías renovables. Asimismo, generar acciones para reducir el ritmo del crecimiento poblacional y establecer programas de desarrollo urbano que impidan la destrucción de hábitats naturales.
De igual manera, reducir el empleo de fósforo y nitrógeno. “Estos elementos son importantes para la actividad agrícola por el uso de fertilizantes, el problema es que los residuos de las áreas cultivadas eventualmente llegan a los océanos y dañan el ciclo del fitoplancton”.
Otras iniciativas que contribuirían a mitigar la contaminación ambiental serían la implementación de programas para fomentar el cuidado del agua, el reciclaje, la prohibición del uso de químicos que degasten la capa de ozono en los procesos de manufactura (cloro y bromo), detener la deforestación y regular la industria pesquera.
“Todos podríamos aportar ideas, algunas de ellas realizables. La ciencia trabaja para desarrollar acciones en ese sentido, algunas se han concretado de manera paulatina, como el uso de energías renovables”, apuntó.
Día Internacional de la Madre Tierra
Barragán Manzo resaltó que la importancia de celebrar este día es generar conciencia sobre el cuidado de suelos, el agua y la atmósfera (zonas críticas), donde se realiza la mayoría de los ciclos geobiológicos al interior del planeta. Son los más frágiles y están severamente deterioradas por la actividad antropogénica.
No obstante, estamos a tiempo, quizá no de remediar ese proceso, pero sí de generar acciones que permitan detener el daño. Si bien seguirán las temporadas de calor excesivo, de huracanes intensos y lluvias erráticas, “no queremos llegar a extremos en los que empiecen a desaparecer las líneas de costa de México”, remarcó.
3er. Encuentro con la Tierra
Planeta Tierra, Madre Tierra, Pacha Mama o Tonantzin, los seres humanos compartimos el mismo planeta y tenemos la responsabilidad de promover la armonía con la naturaleza y nuestro mundo a fin de alcanzar el equilibrio entre las necesidad económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras.
En ese contexto, el domingo 26 de abril, en la alameda de Santa María la Ribera, el IGL celebrará el 3er. Encuentro con la Tierra por los Niños y sus Suelos, que comprende una serie de actividades culturales y de divulgación científica para sensibilizar a la población en torno a la importancia de cuidar el medio ambiente.
Esto coincide con las conmemoraciones internacionales del Año Internacional de la Luz y del Año Internacional de los Suelos, que se celebran este 2015.