“No me duele el útero y sí el alma”, dice víctima de brutal violación colectiva en Brasil

“A todas nos podría pasar esto. No, no me duele el útero y sí el alma por haber personas crueles que están impunes”.

Así se expresó el viernes en su perfil de Facebook la adolescente de 16 años víctima de una publicitada violación colectiva en Río de Janeiro (Brasil), informó el diarioFolha de São Paulo .

El caso se conoció por un video colgado en las redes sociales en el que ella aparece tirada en el piso de una casa en una favela, sangrando, desnuda e inconsciente, mientras varios hombres presumen de haberla violado.

“¡Más de 30 la impregnaron!”, grita uno de ellos.

La policía cree que la violación se produjo el 21 de mayo.

Y la joven, que tuvo que abandonar la vivienda familiar y está en un programa de protección de menores amenazados de muerte, dice sentirse como “basura”, a pesar del apoyo social que ha recibido.

“El estigma es lo que más me duele. Es como si la gente dijera que es mi culpa”, se quejó.

“‘Fue su culpa por usar ropa corta. Fue ella la que fue hasta allá’. Eso es lo que vi en Facebook”, le dijo al diarioO Globo .

La adolescente posteriormente cerró su cuenta en la red social.

“Me intentaron incriminar”
La policía realizó el domingo registros con helicópteros, vehículos armados y perros en dos favelas de Río en busca de sospechosos, pero no ha trascendido si se produjeron detenciones .

En los cinco días desde que el video de la violación fue colgado por uno de los supuestos culpables, la policía interrogó a cinco personas.

Alessandro Thiers (izquierda), jefe de la policía de crímenes en Internet de Río de Janeiro, fue apartado del caso.
Y los hechos han causado conmoción en Brasil, no sólo por la brutalidad de lo sucedido, sino también por la reacción inicial de algunos responsables policiales.

La policía apartó del caso a Alessandro Thiers, jefe de la Unidad de crímenes en internet de la policía de Río, por afirmar que no estaba convencido de que se hubiera producido una violación colectiva.

“Fue horrible prestar declaración porque me culpaban de algo que no hice”, explicó la adolescente en una entrevista con el programa Brasil Domingo Espectacular de la televisión TV Record.

“Me preguntó qué estaba haciendo allí, si estaba relacionada con ellos, si antes había participado en sexo en grupo. El delegado quería echarme la culpa como fuera “, dijo ella, a quien la policía tomó declaración tres veces.

“Me intentaron incriminar, como si fuera culpa mía haber sido violada “, dijo en otra entrevista en el programa Fantástico de la TV Globo.

“Me preguntaron si lo hacía a menudo, si me gustaba hacerlo”.

Ante la situación, la joven dejó de responder. Los interrogatorios fueron dirigidos por Thiers.

“Yo gritaba y lloraba”
Sobre cómo se produjo la violación, la joven dice que fue drogada y que cuando despertó, en una casa desconocida, se encontró a un grupo de hombres alrededor.

Según ella, había alrededor de una treintena de personas en total en la casa, que tenía aspecto de estar abandonada.

En la marcha anual del Orgullo Gay, los manifestantes pidieron “el fin de la cultura de la violación” en Brasil.
“Cuando me desperté tenía uno debajo, otro encima y dos agarrándome”, dijo la joven.

A pesar de sus súplicas, los hombres no paraban.

“Ellos seguían, aunque yo gritaba y lloraba”.

Algunos iban armados.

Preguntada sobre qué sintió en ese momento, contestó.”Quería morir. Solo eso”.

En un principio, la joven no acudió a la policía, por “vergüenza” y porque no confía en que los responsables sean llevados a la justicia.

“Yo creo en la justicia de Dios, que tarda, pero no falla” , declaró.

Manifestantes acudieron a la Asamblea Legislativa para protestar por el caso.
Según el Anuario Brasileño de Seguridad Pública de 2014, en el país se registra una violación cada 11 minutos.

El mandatario interino de Brasil, Michel Temer, calificó de “absurdo” que en “pleno siglo XXI tengamos que convivir con crímenes bárbaros como ese”.

“Tomaremos medidas efectivas para combatir la violencia contra la mujer”, afirmó Temer a través de su cuenta en Twitter.

Fuente: BBC Mundo