El presidente estadunidense Barack Obama se despidió de los corresponsales de la Casa Blanca mofándose de las cadenas de televisión, de sí mismo y de los aspirantes presidenciales Donald Trump, Ted Cruz, Hillary Clinton y Bernie Sanders.
Ante más de mil invitados de la Asociación de Corresponsales de Prensa de la Casa Blanca, Obama dirigió sus mayores dardos al millonario estadunidense, quien había sido objeto de escarnio en ocasiones anteriores y decidió ausentarse del evento.
“El liderazgo republicano está incrédulo de que (Trump) sea su nominado más probable… Dicen que Donald Trump carece de experiencia en política exterior para ser presidente”, dijo Obama en tono serio ante periodistas, políticos y decenas de celebridades de Hollywood.
“Pero seamos justos, él ha estado reuniéndose durante años con líderes de todo el mundo: Miss Suecia, Miss Argentina y Miss Azerbaiyán”, remató Obama sonriente en medio de sonoras carcajadas de su audiencia.
La cena de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca es una tradición anual desde 1914. Su versión moderna, a la que asiste el mandatario en funciones y un comediante, se ha convertido en escenario de arpones humorísticos desde y hacia la institución presidencial.
A lo largo de su sketch cómico, Obama había dirigido bromas hacia políticos y celebridades, y estaba a punto de despedirse con un mensaje serio cuando se detuvo: “¡Estoy bromeando. Todos sabemos que quieren que hable de Trump!”.
De entrada, dijo sentirse dolido por la ausencia del magnate inmobiliario. “La última vez nos divertimos mucho. Me sorprende. ¡Un cuarto lleno de reporteros, celebridades, cámaras y dice que no! ¿Esta cena es muy ordinaria para El Donald?”.
Ante las risas de los presentes, Obama se preguntó qué estaría haciendo Trump en ese momento. “¿Está en su casa, comiendo Filetes Trump, tuiteando insultos a Angela Merkel, qué hace?”.
Para rematar, Obama reconoció que hay un área donde la experiencia de Trump es invaluable: En cerrar Guantánamo. “¡Porque Trump sabe mucho de llevar a la bancarrota a las propiedades en las costas!”
Entre la concurrencia, que llegó al evento con alfombra roja al estilo Hollywood, destacaban los actores Will Smith y Helen Mirren, estrellas de la exitosa serie de televisión House of Cards y personalidades como Michael Bloomberg.
El presidente Obama no ahorró críticas para su compañera demócrata y puntera en la nominación presidencial demócrata, Hillary Clinton, y aunque reconoció su dureza, su inteligencia y su experiencia, sugirió que es algo anticuada.
“Hay que reconocerlo. Hillary apelando a votantes jóvenes es como ver a un pariente que acaba de meterse a Facebook. ‘Creo que no estoy usando esto bien. Cariños, la Tía Hillary’”.
El único aspirante presidencial presente fue el senador socialista de Vermont, Bernie Sanders, acompañado de su esposa.
“Me duele, Bernie -dijo Obama dirigiéndose al senador- que estés distanciándote un poco de mí. Eso no se le hace a un camarada”. Durante su campaña presidencial, Obama fue acusado por los conservadores de ser socialista.
Aunque Ted Cruz no estuvo en la cena, Obama se mofó del traspié del cubano americano cuando describió una canasta de basquetbol como un “anillo”. ¿Qué más tiene en su léxico? ¿Palitos de beisbol?”.
Pero Obama no reservó sarcasmo hacia su propia persona, en especial por el visible envejecimiento físico que ha experimentado desde que se convirtió en inquilino de la Casa Blanca en 2009.
“Hace ocho años, yo era un hombre joven, lleno de idealismo y ahora mírenme. Estoy canoso, contando los días hasta mi panel de la muerte”, bromeó en alusión a las críticas a su plan de salud Obamacare.
Tampoco se salvó la prensa. Obama aplaudió que varios corresponsales de la Casa Blanca ahora dirijan programas de televisión y terminó con un flechazo contra las cadenas. “Jake Tapper dejó el periodismo para irse a CNN”.
Fue la última aparición de Obama como presidente en la cena de los corresponsales de prensa de la Casa Blanca, pues deja el cargo el 20 de enero próximo.
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