Más de 100 millones de animales mueren cada año víctimas de experimentos y vivisección; los principales sectores donde son utilizados son las industrias militar y cosmética, la ciencia e incluso en prácticas docentes, denunció la organización internacional AnimaNaturalis.
La experimentación aplica distintos métodos capaces de producir sufrimiento extremo a las criaturas, por ejemplo, les son provocadas enfermedades que jamás contraerían en circunstancias normales; también se les colocan electrodos en sus cerebros; se les somete a pruebas de irritación en la piel y los ojos; se les priva de luz, movimiento y contacto con miembros de su especie; se les mutila y, finalmente, se les asesina, acusó. Por ello subrayaron la importancia de incentivar a la sociedad a optar por un consumo responsable, a través del consumo de productos libres de experimentación animal.
“Primates, ratas, ratones, conejos, cobayas, perros, gatos, cerdos y otros animales son masacrados en nombre de la ciencia y la técnica, a razón de que tres animales mueren a cada segundo en los laboratorios del mundo”, informó la asociación.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró el 24 de abril como el Día Internacional del Animal de Laboratorio, por lo que AnimaNaturalis México aprovechó el contexto para subrayar la importancia de esta fecha “para informar y concienciar a la sociedad sobre lo cruel e innecesario de experimentar en animales y para difundir las condiciones que sufren millones de aves, conejos, gatos, perros, primates, ratas, ratones e incluso animales de granja utilizados en pruebas de laboratorios”.
A través de la investigación encubierta, diversas asociaciones animalistas han conseguido mostrar a la sociedad los horrores que ocultan los laboratorios.
Esta cruel práctica comenzó desde el siglo XVI con la finalidad de conocer los misterios del funcionamiento del cuerpo, del organismo en sí, de la circulación sanguínea, de la conformación fisiológica, y también de los efectos de medicinas, venenos, sustancias y la inocuidad de los procedimientos científicos e industriales.
En nuestro país se establecieron especificaciones para la producción, cuidado y uso de animales de laboratorio en la Normal Oficial Mexicana NOM-062-ZOO-1999, implementada desde 2001 con la responsabilidad de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Algunas empresas que han dicho NO a las pruebas en animales y venden sus productos en México son: Afterglow, Beenatural, Carmex, DPCN, ELF cosméticos, Fitos Natural, Jane Iredale, Kiss My Face, Green Innovation Cosmetics, Organix, Xamania, L’Atelier des Délices, entre otras, aquí pueden revisar la lista completa realizada por la ONG, donde hay opciones de cosméticos, artículos de higiene personal y de oficina.
A través de la investigación encubierta, diversas asociaciones animalistas han conseguido mostrar a la sociedad los horrores que ocultan los laboratorios. Es así como cada vez más personas han optado por el rechazo a los experimentos con animales en cualquier disciplina, ya sea por ética, economía e incluso por motivos biológico-sanitarios, por la crueldad que se emplea a seres vivo, el peligro que supone la extrapolación de resultados de una especie a otra (como en el caso del SIDA), y su discutible “necesidad” cuando se comienzan a desarrollar métodos alternativos al uso de animales en los laboratorios de ciencia, así como también en las salas de clases de los futuros científicos, destacó AnimaNaturalis.
Fuente: Sin Embargo