Alrededor de 700 koalas serán sacrificados por autoridades locales de Cabo Otway, al noroeste de Melbourne, Australia, por lo que describieron a medios locales como “problemas de superpoblación”.
De acuerdo con funcionarios del estado australiano de Victoria los koalas fueron capturados y sedados antes de ser sacrificados como parte de unas medidas similares a las adoptadas en esa jurisdicción en 2013 y 2014.
“Era claro que había un problema de superpoblación y que los koalas estaban sufriendo en el Cabo Otway porque no gozaban de buena salud y padecían de hambre”, explicó la ministra del Ambiente de Victoria, Lisa Neville, en declaraciones citadas por la cadena ABC.
A pesar de la medida para controlar el número de koalas en esa zona del sur australiano, el problema de la superpoblación se mantiene, lo que obliga a las autoridades de Victoria a buscar otras estrategias de conservación.
A diferencia de Victoria, el koala es considerado una especie amenazada o vulnerable en la costa este de Australia.
Sus principales amenazas son el cambio climático, la pérdida de su hábitat por la expansión urbana y la enfermedad de la clamidia, una bacteria que causa lesiones en los genitales y los ojos de los koalas causándoles infertilidad, ceguera y los consume lentamente hasta la muerte.
El sacrificio de los koalas de inmediato levantó una ola de indignación entre ambientalistas y defensores de los animales quienes manifestaron que la matanza se realizó en secreto.
Información tomada de Agencia EFE