Sargento de EU canalizó armas al Cártel del Golfo

El sargento Julián Prezas, del Ejército estadounidense, admitió haber canalizado con la ayuda de otros soldados decenas de armas de asalto a un cártel mexicano el año pasado, informó El Siglo.

Esta semana Prezas se declaró culpable de dos de cinco cargos que se le imputaban por mentir en formularios federales sobre armas de fuego, según información de agencias sobre un reporte de “The San Antonio Express-News”.

El militar de 36 años reconoció la adquisición de 42 rifles de asalto, más tarde canalizados a miembros del Cártel del Golfo. De esas armas, 23 fueron confiscadas.

De acuerdo con la información, los fiscales se valieron del testimonio de compradores e informantes que ayudaron a
Prezas a enviar las armas al Cártel del Golfo. Hay al menos tres acusados en el caso.

Uno de ellos, que no ha sido identificado, dijo que conoció a Prezas después de que éste publicó en Facebook que tenía mil cartuchos de munición a la venta en el Valle de Río Grande. Según su versión, él compró las municiones y pidió más. El sargento le vendió luego 13 AR-15, entre 50 y 60 AK-47 y una escopeta con los números de serie borrados.

El informante le habría dicho a Prezas que las armas “iban a México”.

Durante la investigación, los agentes usaron a otro informante para comprar armas a Prezas en agosto de 2015, y lo vieron mientras subía cinco de esas armas a su vehículo en la estación de reclutamiento en San Antonio. Lo siguieron hasta que llegó a Pharr, en el Valle de Río Grande. Allí, Prezas le dio las armas al otro informante, quien le pagó 61 mil dólares y le dijo al sargento que las armas eran para el Cártel del Golfo.

Prezas también habría enviado a sus clientes y posteriores informantes de la AFT (Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego) fotos de chalecos que ofrecía por 300 dólares.

Cuando fue arrestado, en septiembre de 2005, Prezas tenía en su poder 17 armas que iba a entregar a uno de los informantes.

En el acuerdo de culpabilidad, afirmó que se apoyó en los militares Thomas John Zamudio, Ricardo Esparza Salazar y Christopher Brown para comprar 42 de las armas que vendió. Prezas enfrenta una sentencia de hasta 10 años de cárcel por los cargos de mentir y hasta 20 años de prisión por intento de exportación de las armas de fuego.