Han pasado seis meses de la masacre de 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa y casi cinco de la detención del exedilJosé Luis Abarca y su esposa, pero éste mantiene su poder e influencia en la zona. Tan es así, que ni la llegada de un edil interino ha impedido que los familiares y amigos del perredista preso en el penal del Altiplano dejen de trabajar en el ayuntamiento de Iguala.
Fue en noviembre pasado cuando tomó posesión Silviano Mendiola Pérez, como presidente municipal interino de Iguala. De inmediato, anunció cambios en su gabinete, bajo la lógica de quitarse la sombra de Abarca. Sin embargo, han pasado casi cinco meses de su llegada y no los ha llevado al cabo al cien por ciento.
De acuerdo con la regidora priista Marina Hernández de la Garza, quien concedió una entrevista a El Financiero, de los familiares y gente de confianza de Abarca Velázquez que permanecen en su cargo están: María Elena Gutiérrez Cruz, quien se desempeña como oficial mayor.
Ella sigue manejando información privilegiada del gobierno del perredista y tiene los recursos que se están usando en esta nueva administración.
El Financiero