La desventaja de loscelulares ultra delgados es que corren el riesgo de doblarse, como hace unos meses ejemplificó uno de los modelos más populares del mercado.
Ante este problema, los fabricantes de teléfonos se enfrentan al reto de encontrar un buen diseño y los materiales adecuados. Un ejemplo de una buena resolución de este problema es el R5 de OPPO que, además de ser el más delgado del mercado con un grosor de 4.85 milímetros, no se dobla.
Esto es gracias a que contrario a otros teléfonos, utiliza en su marco acero inoxidablede alta fortaleza en lugar de una aleación de aluminio. De hecho, este material es tres veces más duro que el aluminio.
El proceso no es sencillo, pero vale la pena. El acero pasa por un cuádruple proceso de forjado, cinco tratamientos de presión, una producción de 55 pasos y más de 1,000 pulidas antes de ser usado en la manufactura final.
Pero no sólo es el marco el que recibe este proceso de fortalecimiento, sino también el acero inoxidable que se usa en la carcasa trasera.
Este proceso logra una dureza cinco veces superior al aluminio de sus competidores, lo que lo hace resistente a cualquier ralladura.
¿CUÁNTO AGUANTA?
La fortaleza de su marco de acero inoxidable pulido a mano resiste 25 kg de presión, evitando la flexión del equipo.
Además, su pantalla tiene protección Corning Gorrilla Glass 3, la más resistente del mercado, lo que reduce el riesgo de quebradura de pantalla haciéndolo resistente a caídas. Así, se puede llevar el celular en la bolsa del pantalón y no preocuparte porque se doble.
El R5 de OPPO ya se comercializa en México a un precio de 7,500 pesos.