LITERALMENTE COMO UN baldazo de agua helada cayó ayer la resolución judicial que ordenó restituir en la Presidencia del ICHITAIP al “incómodo” abogado Rodolfo Leyva Martínez. Palacio de Gobierno ayer hizo mutis y la reacción catatónica fue evidente… al menos hasta ahora. Tienen diez días para apelar la decisión o dejar correr ese plazo para aceptar tácitamente la resolución y en un tercer escenario que se antoja lo mejor para todos, aunque lo más difícil para un gobierno descoyuntado por su soberbia, sería allanarse hoy mismo ante el fallo y que todo volviera a la normalidad que el propio brazo ejecutor del Nuevo Amanecer alteró hace ya un año, cuando instrumentó la caída de Leyva Martínez por no acceder a las pasiones palaciegas de colocar en la Secretaría Ejecutiva del organismo transparente, al esposo de la Secretaria de la Función Pública, Estefany Olmos.
Como era de esperarse, el fallo emitido ayer por un juez de distrito de inmediato se hizo del conocimiento legal y público de los comisionados del ICHITAIP, quienes tuvieron que ser, en primera instancia, quienes recibieran el primer “pepazo” o cobro de factura.
Los malosos nos cuentan que detrás de la postura de Rodolfo Leyva a que se acate ya la resolución para que no continúe el pleito en tribunales, dejó no solamente un mensaje de paz y dejar atrás cualquier rencilla entre los mismos comisionados, sino que es un claro aviso de que continuar por el camino del litigio deja abierta la puerta a la acusación de otros delitos como el concierto de funcionarios públicos para violar la ley, al detallarle al propio Alejandro de la Rocha que fue en su departamento, a la sazón de un sabroso sushi, como se terminaron poniendo de acuerdo para darle cuello al abogado “incómodo” a Palacio.
Otra puntilla la puso Leyva cuando le refirió también a De la Rocha que se gastaron solamente Dios sabe qué cantidad de dinero público en contratar un carísimo despacho de abogados que tienen sus oficinas allá en los edificios de Punto Alto, para que en el proceso judicial salieron con una defensa guanga, estéril y que pareciera que nomás facturaron con dolo las grandes sumas de dinero y abandonaron a su suerte a los pobres comisionados que fueron apabullados en el tribunal federal al ser objeto de una resolución que –literalmente- los colocó en posición de usurpadores, casi como la novela de Televisa.
Hoy, a 24 horas de que el baldazo de hielos haya pasado y el susto menguado, pudiera iniciar el proceso de superar el enojo por la derrota y la frustración ante la impotencia de verse evidenciados en la comisión de un delito. La pelota de juego está en la cancha del Nuevo Amanecer y los comisionados subordinados.
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EN LAS PRÓXIMAS horas, quizá días, dicen los más enterados, podría definirse el futuro partidario del ex gobernador César Duarte al interior del PRI, quien aunque usted no lo crea, tiene intactos sus derechos como militante del Revolucionario Institucional, por más que existan denuncias de corrupción en su contra y hasta solicitudes de extradición, sin embargo, la visita de ayer de Rubén Moreira, secretario de Organización del CEN tricolor, así como de diversos enviados del candidato presidencial del priismo, José Antonio Meade, abrió un dejo de esperanza para aquellos priistas que ven dañina la sombra del oriundo de Balleza, entre ellos el ex gobernador José Reyes Baeza, hoy precandidato al Senado de la República en primera fórmula.
Y es que como los tiempos quizá no den para el arresto de Duarte Jáquez, que bien podría ser beneficioso para Meade o de plano perjudicial, si es que al ex góber le sale lo cantante, lo que podría elevar la credibilidad de los aspirantes de la familia revolucionaria es el poner tierra de por medio con el ex mandón de Palacio, lo que significaría, primero que nada, expulsarlo de las filas del PRI, pues hasta el momento y como si fuera intocable, el actual innombrable en la estructura del Comité Directivo Estatal y entre su gente, continúa siendo un militante más, pero el tablero y las estrategias deben empezar a moverse, y eso significaría desprenderse de lleno de la figura del ballezano.
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PERO AL QUE se le sigue desacomodando el tablero es al PRI de Parral y al ex alcalde de esa ciudad, Miguel Jurado, pues los malosos nos comentan que apenas y el también ex panista logró acomodar a su sobrino en la lista de futuros regidores del tricolor, inició el fuego amigo en contra del ex presidente municipal y por tanto del chamaco que quiere ser edil de esa localidad minera, ya que resulta y resalta que un sector de la militancia tricolor puso el grito en el cielo, destacando que el mozuelo trae arrastrando una denuncia por abuso sexual en contra de una menor desde 2014, por lo que incluso llegó a ser detenido, pero que en aquellos entonces casi casi pasó inadvertida debido a las influencias del tío, sin embargo, hoy con los cambios de mando que ofrece la rueda de la fortuna que es la grilla, la historia salió a relucir y trae más que enojados a los priistas parralenses.
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LOS QUE COMPROBARON el porqué de los movimientos al interior del gabinete de la alcaldesa Maru Campos y la salida de Arturo García Portillo de la coordinación, fueron los del PAN Municipal que encabeza Paloma Aguirre, pues todavía no se cumple ni la semana del adiós del también ex diputado, cuando ya comenzó a jalar al interior del CDM que se ubica en la avenida Ocampos, tan es así que ayer fue presentado como vocero, aunque su jale verdadero será acomodar las piezas para la campaña de reelección de la presidenta municipal, quien tiene en García Portillo a un hombre de todas sus confianzas.
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QUIEN HOY REAPARECERÁ en la escena local tras su gira por Canadá es el gobernador Javier Corral, el cual tiene programado un evento en Palacio de Gobierno para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, a donde está previsto que acudan los otros dos Poderes, el Legislativo y Judicial que encabezan Karina Velázquez y Julio César Jiménez Castro, quien seguramente estará muy asediado tras la aprobación de la Ley de Juicio Político que implicaría actuar contra un par de magistrados “incómodos”, además de que seguramente andará la mandamás del Consejo de la Judicatura Estatal, Lucha Castro, uno de los cerebros detrás de la persecución que se lleva a cabo en la Ciudad Judicial.
Por cierto que dicen los enterados del asunto que la diputada del PRI, Karina Velázquez, nomás no se bajó de la presidencia del Congreso cuando se votaba ante sus ojos la Ley que pudiera ser la soga de su horca con eso de la Ley de Procedencia y Ley de Juicio Político, misma que estará lista, una vez que se publique este sábado en el Periódico Oficial del Estado, para ser utilizada no solamente en contra de los magistrados Gabriel Sepúlveda y Jorge Ramírez, sino en perjuicio de la propia legisladora tricolor.
Resulta y acontece que prácticamente todas sus compañeras diputadas de la bancada rosa del PRI le aconsejaron que abandonara el salón de plenos, con lo cual no solamente rompería el quórum legal, sino que se salvaría de que ambas leyes no fueran votadas, pero Velázquez dijo confiada que no estaba dispuesta someterse a una sanción administrativa que le quitara la presidencia del Congreso del Estado, porque ya se había reunido con el gobernador Javier Corral Jurado en corto, con quien acordó que su caso no llegara a un proceso penal. ¿Será? Y de ser cierto ¿le cumplirán la promesa? Son preguntas de camino al pelotón de fusilamiento.
Source: Columna