En India existen más de 20 millones de niñas que contraen matrimonio con adultos de manera ilegal. Es una problemática sumamente presente y “una realidad” en su cultura. No obstante, la Suprema Corte acaba de pasar una ley en la que las relaciones sexuales con las “esposas niñas” serán consideradas violación y, por lo tanto, crímenes. Lo anterior lo publicó el diario Vanguardia.
India acaba de derrocar una ley que daba licencia a tener relaciones sexuales con menores de edad siempre y cuando estuvieran casados, es decir, descriminalizaba la violación de menores, y aunque este veredicto se considera un triunfo por los grupos de lucha por los derechos de las mujeres y niñas en India, anticipan que será sumamente difícil poner en marcha los nuevos estatutos.
La iniciativa recibió como principal argumento de oposición que “el matrimonio con niñas es una realidad inherente de la cultura en India y estarán criminalizando su consumación”. Antes de esta ley, la edad de consentimiento sexual en el caso de haber matrimonio era de 15 años.
Este avance en la protección de los derechos de las niñas trae a la mesa también el debate sobre la violación marital, es decir, mujeres que sufren abuso sexual por parte de sus esposos sin importar su edad, una figura que no existe en el código penal.
El matrimonio infantil no solo ocurre en la India. Según datos del Banco Mundial y de la ONG Save the Children, cada día más de 20.000 menores en el mundo son obligadas a casarse en países donde el matrimonio infantil está prohibido —7,5 millones de mujeres al año—. En total, y sin tener en cuenta la legislación de cada país, más de 15 millones de menores se convierten en novias sin haber cumplido los 18 años. El Sudeste Asiático y África Subsahariana son las regiones donde el matrimonio infantil sigue estando más arraigado, donde un 50% y el 40% de las mujeres se casan antes de cumplir los 18 años. Según el observatorio Human Rights Watch (HRW), un tercio de las mujeres en los países en vías de desarrollo se casa antes de tener la mayoría de edad, y una de cada nueve lo hace antes de los 15 años.
Estas prácticas “arruinan la vida de millones de niñas”, denuncia HRW e impide su acceso a una educación de calidad. Las menores casadas normalmente abandonan la escuela de forma prematura debido a la presión social, las responsabilidades del hogar o un embarazo y cuidado de sus hijos. Los matrimonios con menores también aumentan la probabilidad de mortalidad o secuelas graves durante el parto —ya que muchas no tienen el cuerpo lo suficientemente desarrollado para ello— así como el riesgo de sufrir violencia doméstica y sexual, alerta Save the Children.
Source: Mundo