Como parte de las acciones tangibles en la ciudad de Chihuahua en materia medioambientalista, durante 2 años de acciones, se puede observar el plantado de más de 20 mil árboles, en su mayoría de encino siempre verde, el cual no sólo beneficia en la imagen de la capital, sino que además mejora la calidad del aire, al disminuir la concentración de gases efecto invernadero.
Con el programa “Chihuahua, La Ciudad del Encino”, se han plantado hasta el momento más de 9 mil unidades en diferentes puntos de nuestra urbe, con lo cual se define que la estrategia del alcalde Javier Garfio Pacheco es trabajar en un tema sustentable, con acciones que benefician a toda la ciudadanía, con una reforestación masiva que dará resultados a corto, mediano y hasta largo plazo.
Uno de los servicios ambientales más importantes que brinda un árbol adulto, como el caso del encino siempre verde, el sauce, álamo y fresno, consiste precisamente en la disminución de la temperatura bajo su follaje, pues de manera inmediata se puede constatar que estar bajo la sombra de un árbol disminuye considerablemente el temple.
Esta situación deriva principalmente de la detención de la luz solar y su energía radiante, lo que, aunado a la retención de humedad en el entorno del dosel protector, puede llegar a crear un microclima hasta 4.6 grados centígrados menos que fuera de su cobertura, convirtiéndolo además en el único recurso natural para la disminución del CO2 que tanto afecta a ciudades como Chihuahua.
Es así que un conjunto de árboles en un entorno favorable, influye necesaria y significativamente en la temperatura ambiente, pues a mayor vegetación, es más la retención de la luz del sol, y mejor el trabajo de evitar que el CO2 llegue al medio ambiente, lo que también tiene como consecuencia una mejor salud en toda la comunidad.
Lo anterior habla de que Chihuahua se mantiene como punta de lanza en establecer estrategias a favor del medio ambiente, no sólo con este programa de reforestación, sino también con el proyecto de “Ciudad Compacta”, en el cual se puede controlar el crecimiento de la ciudad, favoreciendo las políticas medioambientales.
La reforestación en Chihuahua es pues una estrategia que viene a complementar este tipo de políticas ecológicas en busca de la transformación de Chihuahua, porque un árbol puede hacer la diferencia directa en una o más personas, pero miles de ellos benefician en diferentes rubros a toda una comunidad.