El diario Goal publicó que eso es lo que acaba de hacer hace escasos minutos el delantero internacional del Bayern Múnich, Robert Lewandowski.
El cuadro de Pep Guardiola se enfrentaba a un Wolfsburgo peleón, que quería robarle puntos a los bávaros en el Allianz Arena, y la jugada no le pudo salir mejor cuando, a los 26 minutos de partido, ya ganaban 0-1.
Con ese resultado se marcharían al descanso, pero lo que no sabían los de Dieter Hecking era lo que le esperaba tras la vuelta de vestuarios.
Lewandowski, que había comenzado el partido en el banquillo, salió en la segunda mitad para desatascar el partido, y no solo cumplió con su cometido, si no que desató la locura de una hinchada que no podía creerse lo que estaba pasando. Cinco goles en nueve minutos. Minutos 51′, 52′, 55′, 57′ y 60′.
Este ha sido el intervalo de goles del polaco, culminando su obra maestra con un quinto gol de bandera, haciendo una tijereta y provocando que su entrenador, Pep Guardiola, se tapara la cara incrédulo ante el espectáculo de su ariete.