Un estudio realizado por los expertos de la Universidad Estatal de Florida publicado por la revista Time expone que la gente que lava los trastes de manera voluntaria experimenta una reducción significativa en sus niveles de estrés y un aumento de los sentimientos de inspiración, informó Excélsior.
De acuerdo a los análisis expuestos en dicho reporte, hay algo en el contacto con el agua, los platos limpios y el aroma del jabón que hace que una persona se sienta menos nerviosa y más tranquila consigo misma.
No obstante, para sentir estos efectos positivos, el que lava los platos debe hacerlo de forma intencional y conciente pues los sujetos de estudio que lo hicieron de manera obligada no se beneficiaron de las bondades del lavado de platos cotidiano.
El estudio fue realizado con 51 alumnos, un número pequeño para una prueba como ésta pero que nos deja ver a esta ‘engorrosa’ actividad bajo una óptica diferente.
‘Mientras se lavan los trastes, uno debe estar completamente conciente del hecho de que se está lavando los platos. A primera vista, esto puede parecer un poco tonto. ¿Por qué poner tanto énfasis en una cosa tan simple? Pero ese es precisamente el punto. El hecho de que uno se encuentra de pie allí y lavando es una realidad maravillosa. Estoy siendo completamente yo mismo, a raíz de mi aliento, consciente de mi presencia, de mis pensamientos y acciones’, reza el documento.