Lizzie Velásquez, tenía 17 años cuando consultando YouTube un video titulado “La mujer más fea del mundo” se dio cuenta que de quién hablaban era de ella.
Originaria de Texas, se dio cuenta de las burlas que era objeto en un ocho segundos y ya tenía cuatro millones de visualizaciones, cuando al leer los comentarios se “hundió” al leer frases como “¿Por qué la tendrían sus padres?”, “Que la quemen”, otros sugerían que debería suicidarse.
“Lloré noches enteras… No pude contarle a nadie sobre el tema. No le dije nada a mis amigos. Estaba demasiado impresionada”, dijo en entrevista a Kathleen Hawkins de la BBC, al informar que nació con dos enfermedades raras, el síndrome de Marfan, afección de los tejidos conectivos e inusual de la longitud de los miembros y la lipodistrofia, que provoca una distribución anormal de la grasa corporal.
Ahora con 26 años, mide metro y medio y pesa 27 kilos, está totalmente ciega del ojo derecho y tiene discapacidad visual en el izquierdo, sufre de agotamiento e infecciones con frecuencia, como bronquitis.
Tras el video de burlas, Velásquez decidió abrir su propio canal de YouTube para hacer saber a la gente quién era realmente la persona de la que hablaba el video de “La mujer más fea del mundo” y para animar a otros a sentirse cómodos en su propia piel y tener confianza en ellos mismos y en aseociación con Tina Meier, cuya hija Megan se suicidó después de haber sido acosada en internet, y juntas están haciendo campaña para que los representantes del Congreso de Estados Unidos voten a favor del primer proyecto de ley federal contra el acoso escolar.