En el Palacio Legislativo de San Lázaro, organizaciones de la sociedad civil mexicanas e internacionales denunciaron que las políticas de atención a víctimas de trata están enfocadas principalmente a mujeres y a delitos de índole sexual, por lo que se deja de lado a varones que sufrieron otras variantes de esta práctica, ya sea a manos del crimen organizado o de empresas.
Durante la mesa de trabajo “Trata de Personas, la Esclavitud del Siglo XXI”, llamaron a los legisladores a estrechar los vínculos con los ciudadanos y fortalecer el marco jurídico ya que, lamentaron, en México no existen refugios que reciban a varones víctimas de tratantes.
Subrayaron que no se combate de manera suficiente a otras variantes de esta práctica que no sean las de comercio sexual, como el reclutamiento forzoso en campos agrícolas o para actividades ilegales por parte de grupos del crimen organizado.
La diputada Sara Paola Gálico Félix-Díaz (PVEM), responsable del encuentro, afirmó que en nuestro país hay identificadas por lo menos 47 bandas que se dedican a la trata; además, subrayó, “es un fenómeno que ha aumentado a pesar de las sentencias que se han logrado”.
Añadió que estas bandas han recurrido a captar a hombres, niños y adultos mayores para “ponerlos a trabajar” bajo sus órdenes, en actividades como la mendicidad.
Destacó que la prevención es la parte más importante y en la que deben enfocarse los esfuerzos, además de fortalecer el marco jurídico e “ir de la mano con ellas”, con las organizaciones preocupadas por este problema.
El experto de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), Felipe de la Torre, precisó que, de acuerdo con el “Diagnóstico Nacional sobre la situación de la Trata en México”, la mayor parte de responsables de este delito son personas que pertenecen al círculo más cercano de las víctimas, como son sus familias. “Hay un estado de putrefacción de los valores familiares”, consideró.
Puntualizó que la atención mediática se enfoca en la explotación sexual de las mujeres y se deja de lado a hombres, niños y ancianos, que son reclutados como jornaleros agrícolas, en centros manufactureros o para actividades de pesca y caza ilegal, y alertó que existen focos rojos o de riesgo en la industria minera y plantaciones de banana y café.
Agregó que la mayor parte de la información sobre esta práctica es errónea, disociada o poco fiable por lo que no existen números claros de cuántas víctimas y victimarios hay a nivel nacional. “No tenemos albergues o refugios especializados para hombres que sufrieron este delito”, concordó con los participantes.
La presidenta de la Comisión Unidos contra la Trata A.C., Rosi Orozco, afirmó que de los cuatro refugios para víctimas de trata que existen en México, ninguno recibe a varones. Pidió al Legislativo exhortar a las entidades federativas a no promover estas prácticas o la apología de este delito.
Informó que hoy en día se han logrado 550 sentencias en contra de tratantes, la mayoría de las cuales se dieron en los estados de Puebla y Chiapas, así como en el Distrito Federal.
Destacó el papel clave de los medios de comunicación para el combate de este delito y pidió a la sociedad denunciar esta práctica a la línea especial de atención nacional 01-800-55-33-000.
Yuriria Álvarez Madrid, directora general del programa de Trata de Personas, de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), puso a disposición todas las herramientas y datos con las que cuenta, para el servicio del Legislativo.
“La CNDH se suma a los esfuerzos que realiza la Cámara de Diputados en este contexto”, sostuvo.