Las infecciones que atacan las vías urinarias representan el tercer padecimiento más común entre los chihuahuenses, luego de las Infecciones respiratorias agudas y de las infecciones intestinales.
Durante el primer semestre del 2015 se registraron 70 mil 32 casos de infecciones en vías urinarias en la entidad, es por ello que el Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Salud informa a la comunidad cómo prevenirlas.
Las infecciones en el sistema urinario pueden adquirirse por múltiples factores, como una higiene deficiente, anormalidades en la orina o en las vías urinarias y en una menor medida a las prácticas sexuales.
En lo que respecta a la higiene es común promover el lavado de manos después de ir al baño pero, pocas veces se recomienda hacerlo antes, esto es de vital importancia pues las manos llevan microorganismos con los que se estuvieron en contacto en el trabajo o en la calle.
Otra alteración frecuente es la orina misma pues al no ingerir suficiente agua o tardar demasiado para ir a orinar, las bacterias presentes de forma natural en las partes más externas del tracto urinario, comienzan a proliferar y pueden posteriormente desencadenar la infección.
Este problema en las vías urinarias es más común en la población femenina ya que anatómicamente tienen la desventaja de una uretra mucho más corta, mientras que entre mujeres de mayor edad, se producen alteraciones como el cistocele mejor conocida como “vejiga caída”, que es una causa frecuente de infecciones.
Es importante mencionar que las prácticas sexuales son un factor importante, este tema debe ser discutido con su médico ya que una probabilidad es que un miembro de la pareja sea tratado mientras que el otro no, lo que produce infecciones recurrentes.
Los síntomas de infección de vías urinarias van desde una orina de olor fétido, ardor, pus, sangrado, fiebre muy alta, malestar general, aumento de la frecuencia de orinar, sensación de pujar para poder orinar o de no haber terminado.
Cuando se presenta alguno de estos síntomas es recomendable aumentar la ingesta de agua y de alimentos cítricos, esto ayuda a barrer las bacterias con una orina más frecuente y ácida e incluso elimina la infección.
Sin embargo se debe acudir al médico para que valore el caso y administre antibióticos en caso de ser necesario. En ocasiones las infecciones son frecuentes o no responden al tratamiento por lo que se deben realizar exámenes como el urocultivo el cual determinará el microorganismo causante y el antibiótico adecuado para atacarlo.