Para el Senador Javier Corral, el modificar una ley que se aprobó en esta misma administración, demuestra que las reformas estructurales son iguales a cualquier otra regulación.
Para el Senador Javier Corral Jurado, lo que está de fondo en las propuestas por aplazar la fecha del apagón analógico, es el hecho de que Grupo Televisa no realizó la inversión necesaria para la digitalización de señales en todo el país, específicamente en aquellas señales que atienden las zonas más pobres y marginadas del país, donde el interés publicitario de los anunciantes es casi nulo, y por el contrario, lo que busca es un año más de concentración de espectro, infraestructura, publicidad y audiencia.
Según cifras del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en un informe sobre la evolución del programa de la Transición Digital Terrestre (TDT), menciona que del total de las 460 estaciones principales que existen en el país, ya están operando 445 mil 14 en instalación y una sola en proceso de autorización; de estas señales existen 846 y sólo 67 están digitalizadas porque así se asignaron originalmente; 313 tienen solicitud de migración pero no existe información sobre si alguna ya está en operación, y más de la mitad, el 55 por ciento, ni siquiera cuentan con una solicitud de migración ante la autoridad.
“Al no ser rentable, no asignaron los recursos para adecuar la infraestructura necesaria de las antenas para las estaciones de señales complementarias e incluirlas en el nuevo modelo de migración de la TDT”, mencionó el Senador por el Partido Acción Nacional (PAN), en un comunicado.
Esto se contrapone a lo que Emilio Azcárraga Jean, presidente de Televisa, anunció el pasado 21 de octubre en el programa radiofónico de Ciro Gómez Leyva. Sostuvo que Televisa ya había realizado la inversión y tenían medidos los costos, por lo que no tenían ningún problema en seguir; que ya transmiten en señal digital desde hace 11 meses y que producen programas ya para esa tecnología.
Pero, agregó, que veía “complicadísimo” y “bien difícil”, concretar la transición de lo analógico a lo digital en televisión abierta, y que más allá de querer boicotear el proceso, la empresa defendía el derecho a la televisión abierta de millones de personas en el país.
Esos millones de personas que viven en las zonas más marginadas, es a las que no les digitalizó su señal de televisión. Para el Senador resulta una mentira el argumento, porque con las cifras del IFT, queda evidenciada la falta de inversión en las antenas de señales complementarias.
“Si este espíritu por defender los derechos fundamentales fuera real, se solicitaría acelerar tal proceso para generar una auténtica competencia en el sector, y animar así, la pluralidad de contenidos”, agregó el Senador.
La TDT fue uno de los temas más relevantes en el proceso de aprobación de la Reforma en Telecomunicaciones y Radiodifusión, al ser una innovación tecnológica de gran impacto en el ejercicio del derecho a la información, competencia en televisión y pluralidad y diversidad de contenidos, ya que permite transmitir, donde antes había un solo canal, varias señales más.
Las razones por las que analistas consultados por SinEmbargo consideran que Televisa se opone a la acción constitucional, es por motivos de competencia y su modelo de negocios; requieren del rating para ofrecer paquetes de publicidad, la principal fuente de ingresos de las televisoras.
En este sentido, la entrada de Cadena Tres al mercado, es un factor que las empresas que controlan el 96.5 por ciento del mercado, Televisa y Tv Azteca, que consideran riesgoso para sus ingresos por publicidad.
Entonces posponer el apagón también es un freno a la entrada de Cadena Tres, quien pagó mil 800 millones de pesos por una cadena de televisión digital de cobertura nacional. Además anunció un soporte financiero de 10 mil millones de pesos para el despliegue de toda la infraestructura necesaria y ya está en un proceso de transición que le ha generado gastos por más de 5 mil millones de pesos.
Otro mercado que Televisa quiere cuidar es el de la televisión por cable, donde fue declarado Agente con Poder Sustancial al tener una participación del 62 por ciento.
Sin embargo, es este mercado el que actualmente sostiene a la empresa: sus servicios de triple play, IZZI, Cablecom y Sky suponen en 2015, el 54.2 por ciento de los ingresos de la empresa, 12 por ciento más en comparación con el mismo periodo de 2014. En lo que respecta a los ingresos por los servicios de cable (Ceblevisión, Cablemás, Cablecom, Telecable) en los tres últimos meses fueron de 5 mil 912 millones de pesos, con una utilidad de 2 mil 372 millones de pesos.
Aplazar el “apagón analógico” beneficia al preponderante de la televisión restringida; es decir Televisa, pues la TDT abriría mayor oferta programática y de contenidos de manera gratuita, lo cual impactaría en la disminución de sus suscriptores actuales.
Esta fue una de las razones de mayor peso para boicotearlo en 2013, ya que con la señal digital hay casas que reciben hasta 40 canales. “La ecuación es muy sencilla: TDT aumenta disposición de canales abiertos en beneficio del consumidor. Más competencia, menor precio”, se agrega en el documento.
Otra de las consecuencias sería el retraso del proceso de licitación de la Red Compartida que será desplegada en la banda de los 700 MHz y que hoy es ocupada en varios segmentos por algunas concesiones de televisión. Esta política, además de atraer fuertes inversiones, es una oportunidad para aumentar la cobertura de Internet en zonas rurales e impulsar la inclusión digital, otra de las promesas de la reforma en materia.
Sin Embargo