Con la encomienda de abrir las puertas del PAN a los ciudadanos, la presidenta de la Comisión de Vinculación, Josefina Vázquez Mota, alerta sobre la necesidad de atajar la moda de ser anti establishment e ir contra las instituciones, incluidos los partidos.
Se describe convencida y a favor de las candidaturas independientes como parte del proceso democrático, pero considera que existe el riesgo de asumirlas como la solución a los problemas, una panacea. Y, peor aún: de usarlas como un referente de pretendida independencia partidista.
En entrevista con Excélsior, la exabanderada presidencial ironiza sobre quienes utilizan esa figura cuando siempre han tenido una militancia concreta.
“No se puede decir, bueno, ahora soy candidato ciudadano, aunque haya militado 50 años en un partido. Anoche vivía en un partido y hoy me desperté ciudadano”, plantea.
“Alguien decía que nuestro pasado es nuestro prólogo en la vida. Y no podemos pretender que no se tiene. Y pedir que voten por mí como ciudadano bajo la idea de que todo lo que tiene que ver con los partidos es malo”, detalla.
“Bienvenidas las candidaturas ciudadanas pero también necesitamos instituciones fuertes. Hoy lo que está de moda es ser anti institucional y anti establishment. Y aunque hay razones para serlo, eso me parece muy delicado”, alerta.
La exsecretaria de Educación Pública se pregunta: “¿Acabamos con las instituciones y las destruimos creyendo que México será entonces el paraíso y tendrá la solución o transformamos y fortalecemos las instituciones que hemos vulnerado?”
Y se responde: “Para mí, un México sin instituciones fuertes es un México bárbaro, de pérdida de libertades y tan incierto que no puedo ni siquiera imaginarlo”.
La también ex titular de la Sedesol comenta que tanto partidos como ciudadanos irán aprendiendo a darle a las candidaturas independientes su dimensión.
“Confío en la inteligencia de los ciudadanos de que habremos de ir distinguiendo entre quienes se dicen independientes y lo son, y quienes se dicen independientes y nunca lo han sido ni lo serán. Y que también esto sea –como lo está siendo— un acicate para los partidos”, argumenta.
Si bien aclara que nunca estaría a favor de una ley que obstaculice estas candidaturas, califica como “una concepción maniquea pretender que un México sin partidos sería un paraíso o la solución”.
Enfatiza que, por el contrario, “un México con partidos débiles tendría una democracia mucho más débil”.
“En la orfandad”
Para la excoordinadora de la bancada blanquiazul en la Cámara de Diputados, candidatos independientes que lograron apoyo en las urnas lo hicieron con el discurso y las propuestas que caracterizaron por muchos años al PAN
“Quiere decir que hay un sector de la población que seguramente se sintió en orfandad y que no vio una alternativa en nosotros ni en los otros partidos”, asume.
De manera que recuperar la confianza de los ciudadanos es, para Vázquez Mota, una de las tareas clave de la Comisión de Vinculación panista.
“El PAN es el único partido que surge de los ciudadanos, no desde grupos de poder. Y este es el momento de regresar al encuentro de la ciudadanía”, define.
Describe la actual circunstancia nacional de hartazgo, indignación y reclamos. Y considera que frente a ésta se requiere de una vinculación que vaya más allá de los mítines y las campañas.
“He platicado con el presidente (Ricardo) Anaya y esta Comisión debe ir a vincularnos con el propio partido, y abrir las puertas, sin temor, a aquellos ciudadanos que por muy diversas razones fuimos dejando en el camino: mujeres, empresarios, indígenas, los jóvenes, las universidades, la sociedad civil organizada”, enumera.
Para la excandidata presidencial se requiere de “un nuevo equilibrio” entre la participación ciudadana y los cuadros políticos.
“Tenemos que construir un nuevo andamiaje que permita a cada quien tener su gestión, que los gobernadores construyan estos vínculos y sean los ciudadanos el centro de su gestión, más allá de incentivar una actitud patrimonialista o de fortalecer cacicazgos, que no tienen nada qué ver con la construcción y el espíritu del partido”, explica Vázquez Mota.
“La idea es fortalecer esta instancia y construir una red para romper con la visión centralista”, sostiene.
Tarea partidista
La política panista reconoce que esta es la primera vez que, después de la campaña presidencial de 2012, se involucra en una responsabilidad directa en el Partido Acción Nacional.
Vázquez Mota dice haber aceptado la invitación de Anaya bajo el convencimiento de que “no puede haber una democracia sólida sin instituciones sólidas”.
Cita la Encuesta de Latinobarómetro 2015, que da cuenta de que tres de cada cuatro mexicanos no confían en los procesos electorales y que, a diferencia de otros países de la región que aumentan su entusiasmo por la democracia, México se encuentra en los últimos lugares en ese ánimo.
Lecciones
Considera que el PAN necesita “un liderazgo congruente, incluyente, que no aliente a los caciques, que regrese a las bases del PAN, que exija rendición de cuentas, que sepa construir y ejercer su liderazgo como oposición, que esté convencido que el partido es un instrumento para servir a los ciudadanos”.
Vázquez Mota dice tener la expectativa de que su aprendizaje en la campaña presidencial de 2012 pueda traducirse en lecciones para los futuros comicios.
“No puede haber decisiones absolutas ni homogéneas. Sería un grave error decir que todas sean designaciones o todas se resuelvan en contiendas internas, aunque de ahí salgamos medio muertos, con heridos, bajas y ya sin fuerza para ir por la diputación, la gubernatura o la Presidencia”, propone.
Pero puntualiza: “Creo que sería un gravísimo error colocarnos en el 2018 sin antes hacer la tarea que nos corresponde. Porque no habrá un 2018 exitoso si antes no hacemos la tarea del 2015, 2016 y 2017”.