El juez Mariano Moctezuma Castillo sentenció a 5 y 7 años de prisión a cuatro adolescentes por el asesinato de un estudiante de secundaria ocurrido el pasado 6 de febrero, publicó el medio nacional Proceso.
Los menores deberán pagar 350 mil 500 pesos para indemnizar a la familia de la víctima y 19 mil 500 por gastos de funeral, de acuerdo con el expediente del procedimiento especial abreviado.
Lo anterior, debido a que los imputados reconocieron su culpabilidad y renunciaron a un juicio oral.
El juicio abreviado permitió a los jóvenes obtener menor condena al reconocer que son responsables del crimen.
Irving Reyes González, de 14 años, desapareció después de que salió de la secundaria federal número 2 “Altavista” donde cursaba el tercer grado. Su familia interpuso el reporte de ausencia, tras lo cual su cuerpo fue localizado dos días después.
El adolescente fue encobijado y enterrado de manera clandestina en el patio de una casa ubicada en la calle Helio de la colonia Postal. Después de 48 horas de desaparecido, los agentes estatales de la Fiscalía Zona Norte exhumaron el cadáver, el 9 de febrero.
La víctima apenas acababa de llegar a Ciudad Juárez para vivir con su madre Blanca Estela González Puebla, ya que radicaba en la ciudad de Chihuahua con una tía.
Los vecinos de la colonia y padres de familia de la secundaria “Altavista” presionaron a las autoridades para que investigaran a la pandilla “Florencia”, conformada por estudiantes expulsados de la escuela por mala conducta y que tenían asolados a los residentes.
Las autoridades aprehendieron primero a tres adolescentes. Uno de ellos, Óscar Adán alias El Chicha, confesó a sus padres que había participado y éstos lo entregaron a las autoridades.
Posteriormente detuvieron al cuarto joven que participó en el homicidio.
Irving le había contado a su madre que los integrantes de la pandilla “Florencia” lo molestaban porque la novia de uno de ellos lo buscaba, pero aseguró que podía resolver el problema.
Óscar Adán, el novio de la adolescente amiga de Irving, invitó a éste a una fiesta. Según testigos, ahí estaban los agresores de Irving quienes consumían bebidas alcohólicas y mariguana.
En ese lugar Óscar Adán le reclamó a Irving que estuviera hablándole a su novia y días después planeó agredirlo.
El Chicha, de 16 años, confesó cuando los aprehendieron el pasado 10 de febrero:
“Lo cité en la secundaria y lo llevé a mi casa y fue cuando le pregunté que qué problemas tenía conmigo y hubo un chisme de que él salía con mi novia y hacían cosas y entonces me enojé y fue lo que le pregunté y él me dijo: ‘de todos modos yo le voy a decir a los amigos de mi papá si me quieres hacer algo que te lo hagan primero a ti y a tu familia, que al cabo no te van a creer’”.
Óscar Adán se molestó y le pidió a su “rival” que fueran atrás de una casa abandonada. Ahí golpeó a Irving con una piedra en la cabeza y les habló a sus amigos para que lo ayudaron a apuñalarlo y a ahorcarlo.
El pasado 30 de noviembre, Óscar Adán, de 16 años y Miguel Ángel P.P., de 15, fueron condenados a siete años, mientras que a Juan José R.G., de 16 años e Iván C.P., de 17, los condenaron a cinco años.
Este caso conmocionó a la sociedad juarense y los padres de familia de la escuela, quienes exigieron mayor seguridad para sus hijos ya que había antecedentes de acoso y amenazas en la secundaria y en la colonia.