La Comisión de Derechos de la Niñez avaló diversos dictámenes para crear conciencia sobre el abuso sexual infantil que afecta a alrededor de 4.5 millones de menores mexicanos; prevenir el ciber-acoso, la pornografía infantil y proteger a este sector en albergues e instituciones dedicadas a su alojamiento.
En una reunión de trabajo, la Comisión que preside el diputado Jesús Valencia Guzmán (PRD), aprobó el proyecto de decreto para que se declare el 19 de noviembre Día Nacional Contra el Abuso Sexual Infantil, a fin de crear conciencia y reflexionar sobre esta problemática, fomentar la cultura de la denuncia y sensibilizar a la sociedad sobre la necesidad de trabajar conjuntamente para erradicar todos los tipos de violencia contra las niñas y los niños.
En el documento se indica que a nivel mundial, México ocupa el primer lugar en abuso sexual, violencia física y homicidios de menores de 14 años y, de los menores víctimas de abuso sexual, sólo el dos por ciento de los casos se conocen al momento en que se presenta.
De los casos presentados, 77 por ciento son niñas y 23 por ciento, niños; las personas con discapacidad física o mental tienen más riesgo, independientemente de su género. Además, 80 por ciento de los casos se comete en casa por un familiar. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en el 27 por ciento de los casos, el agresor es el padre o figura paterna; 18 por ciento el abuelo; 16 por ciento un tío o conocido y 12 por ciento, un hermano mayor.
“El gobierno y la sociedad civil deben garantizar y promover el respeto a los derechos de los menores para evitar que sean objeto de abusos e intervenir en la difusión de una educación a la sociedad y la familia, mediante la declaración de este tipo de fechas para protegerles de toda forma de abuso físico o mental, descuido o trato negligente o explotación, incluido el abuso sexual”.
Por otra parte, se avaló un exhorto a las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que ejecuten campañas de información sobre el llamado “cortejo” o “grooming”. Difundir en qué consiste, cómo identificarlo, cómo denunciarlo e invitar a los padres de familia a involucrarse en las actividades de sus hijos para evitar la comisión de un posible delito, ante el incremento del uso de Internet para producir y distribuir materiales de violencia sexual contra la niñez.
Se calcula que el número de internautas en México es de casi 52 millones de personas, de las cuales 12 millones de niños y adolescentes sufren este delito. En 2013 se detectaron más de 12 mil cuentas personales falsas a través de Internet que exhibían imágenes de explotación sexual infantil, y en 2015 el delito registró un aumento, por lo que es necesario duplicar esfuerzos para prevenirlo.
De igual forma, esta instancia aprobó el dictamen a un punto de acuerdo para exhortar a la titular de la Procuraduría General de la República para que –a través de la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas— implemente las medidas necesarias a fin de redoblar esfuerzos en la investigación y sanción de delitos relacionados con la emisión, generación, acopio, almacenamiento y demás relacionados con la pornografía infantil.
Se debe incrementar el uso de herramientas tecnológicas para atender, con más efectividad, el fenómeno emergente y creciente de los delitos cibernéticos y tomar acciones para reforzar los sistemas de investigación y prevención.
Asimismo, se avaló otro exhorto para que los sistemas Nacional y estatales para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), a través de la Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes y las de Protección de Niñas Niños y Adolescentes de cada entidad –y cuando sea necesario, en coordinación con las secretarías de Gobernación y la de Desarrollo Social— realicen inspecciones y visitas de supervisión a albergues e instituciones dedicadas al alojamiento y cuidado alternativo de menores.
El documento refiere que en México no existe una cifra real de cuántos niños viven en situación de calle, sin embargo, Unicef señala que hay 1.6 millones de casos de abandono de niños, posicionándose en el segundo lugar de América Latina, sólo por debajo de Brasil.