Tras el fracaso en el Mundial de Clubes, América decidió darle un torneo más de oportunidad a Ignacio Ambriz en la dirección técnica de las Águilas.
La derrota inesperada en el Mundial de Clubes ante Guangzhou fue un auténtico ‘temblor’ en América, y en el plantel el nerviosismo y la inestabilidad están a flor de piel, conscientes de que quedaron a deber en este segundo semestre de 2015.
Emilio Azcárraga, dueño del América, presenció el duelo contra el equipo chino el pasado domingo y tras la derrota, echaba rayos al no dar crédito de lo sucedido. De inmediato regresó a México y a todos los ‘viajeros’ les quitó la sonrisa. Al igual que Yon de Luisa se encuentran muy incómodos por la situación.
El presidente deportivo, Ricardo Peláez, también puso la renuncia sobre la mesa, aún está muy dolido por el fracaso, pero fue incitado a que lo pensara mejor. El dirigente azulcrema está muy apenado por lo sucedido con la afición y los dueños, pero sabe que dentro del equipo ya hay que pensar en el 100 aniversario y darle vuelta a la página lo más rápido posible.
En cuestión de disciplina sí habrá un cambio considerable y ahora no todo quedará en simples regaños, ya que se avecinan multas económicas al que no cumpla con el manual, y en el caso de Darwin Quintero (quien agredió a Sambueza) ya no pasará desapercibido.
Del mismo Darwin sigue sin cambiar su actitud, y aunque se piensa en darle una oportunidad, ya para nada gusta su postura de que se la viva peleando ‘con todo mundo’ y no conviva como se debe, como comparte una misma fuente en el club.
En el cuerpo técnico también se avecinan cambios, ya que para nada gusta que los auxiliares actuales sean simplemente ‘corderitos’ y no recriminen o contradigan algo al mismo Ambriz.
“Nacho requiere un grupo de auxiliares que le repliquen, los actuales no debaten. Nacho tiene también que creérsela y estar a la altura. Hay que retomar las bases de lo que funcionaba, muchos se pusieron cómodos y viviendo del pasado”, dijo la fuente.
La idea dentro del plantel es la continuidad y se piensa en dos refuerzos máximo.
Las Águilas lucharan la madrugada de este miércoles por no quedar en la historia como uno de los peores equipos mexicanos en participar en un Mundial de Clubes, cuando se enfrenten al Mazembe, el Campeón africano, en la bíusqueda del quinto lugar del Mundial.