El alcalde de Chihuahua, Eugenio Baeza Fares, acudió esta mañana a la preliberación de 20 reos indígenas que dejan hoy el Centro de Reinserción Social número 2 a pocos días de nochebuena y navidad, lo que calificó como un conmovedor programa impulsado por el gobernador César Duarte.
Los hombres, quienes regresan a comunidades como Batopilas, Guadalupe y Calvo, etcétera, recibieron de manos de Baeza y Duarte una dotación de cobijas y despensa, a fin de no llegar con las manos vacías a casa.
“Un prisionero es un predicador de libertad”, dijo el presidente municipal al dirigirse a los presentes al reflexionar el incalculable valor de ser libre. “Este es un acto humano, fraterno y justo por parte del gobernador”, agregó.
En este sentido, dijo que Duarte Jáquez está profundamente comprometido con las comunidades indígenas, y que es a través de estos eventos que muestra su respeto a la cultura y tradiciones de los moradores de la Sierra Tarahumara.
“El hecho de que el gobierno recoge el concepto de reparación de daño abona a la equidad en el sistema de justicia penal, estos hombres merecen ser liberados de su celda y del olvido, pero sobre todo, merecen ser liberados del hambre, de la pobreza, del aislamiento”, dijo el también empresario.
Al finalizar, reconoció que el gobernador ha acercado a las comunidades indígenas a la justicia jurídica y social, además de que ha despertado en los chihuahuenses un nuevo modelo de conciencia social ante los integrantes de estas etnias.