Hasta una semana antes o probablemente dos de la llegada del Papa Francisco a México, serán repartidos los boletos que permitan a las personas acceder a los eventos, sobre todo misas, que desarrollará en este país del 12 al 17 de febrero próximos, informó Excélsior.
Uno de los principales motivos es para evitar que sean clonados y que se lucre con ellos, ya que son “estrictamente gratuitos”, adelantó en entrevista con Grupo Imagen Multimedia el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), el obispo Eugenio Lira Rugarcía.
“Yo calculo que podamos distribuirlos unos 15 u 8 días antes de los eventos, precisamente para garantizar la seguridad, que no sean clonados, pues esto que favorezca precisamente las medidas de protección y seguridad que las autoridades están pretendiendo que se observen”, dijo.
Explicó que actualmente la CEM los está diseñando con algunos candados de seguridad, y en cuanto estén listos los borradores se presentarán a consideración del Estado Mayor Presidencial (EMP) para ver si se responden a los parámetros requeridos.
Posteriormente, éstos se repartirán “en número equitativo de pases” a cada diócesis del país, tomando en cuenta diversos aspectos: el tema del evento; es decir, si es una reunión con jóvenes, migrantes, familias o religiosos.
Además, cada obispo recibirá una cierta cifra de boletos con base en “el número de católicos y de habitantes que tiene esa diócesis”; medirán también “la cercanía de la diócesis respectiva” a cada Arquidiócesis sede de la visita del Papa.
“Tomando todos estos elementos en cuenta, se les enviará a las diócesis sus paquetes respectivos de boletos para que puedan los señores obispos distribuirlos como lo crean conveniente…
“Aprovecho para recordarle a la gente que los boletos son totalmente gratuitos, no se compran, no se venden, son absolutamente gratuitos”, dijo.
‒¿Cuántos boletos están contemplando para todos los eventos, monseñor?
‒Estamos haciendo ahorita el peinado de las zonas; yo espero que esta semana tengamos el estimado. Tenemos que ver cómo están las zonas y los lugares certeros en que se van a poner pantallas ‒contestó.
Como Grupo Imagen Multimedia informó el sábado pasado, Lira Rugarcía recordó que los boletos serán repartidos “entre los más comprometidos” con la Iglesia y a criterio de cada obispo diocesano.
“Solamente se está pidiendo la misa en San Cristóbal privilegiar a los indígenas… en Chihuahua se está pidiendo privilegiar a quienes lleven la realidad de la migración o quienes han sido víctimas de alguna forma de violencia”, agregó.